Miércoles de alegría para los mercados europeos, pero especialmente para la bolsa alemana, animada por la última decisión del Bundestag de aumentar el gasto en la nación, una medida muy esperada por los mercados ante la debilidad de esta economía. Ante ello, el índice de referencia germano, el Dax, se anota una subida del 3,4% en la sesión, frente a las subidas de en torno al 2% que se han anotado sus homólogos del Viejo Continente. Esta nueva subida deja al selectivo a un 0,3% de sus máximos históricos, que marcó en los 23.147 puntos a principios de esta semana. El resto de bolsas de la región se han visto contagiadas por la euforia.
Esta subida diaria de la bolsa alemana es la más elevada desde octubre del año 2022, en que llegó a alcanzar un 3,8% de alza y que acerca al índice al 16% de ascenso este 2025. Y es que, en menos de tres meses, ya se anota un 15,9%, mientras que, en su escalada del año pasado, llegó a acumular un 17% de alza. La bolsa alemana se había visto impulsada claramente por la celebración de elecciones en el país, que se tradujo para los inversores como una señal de que el ganador de las urnas apostaría por invertir en Alemania y un impulso que parece necesario para que el motor de Europa vuelva a agarrar velocidad.
El gestor de carteras de Vontobel, Felipe Villarroel, asegura que "tanto las cifras como el cambio de actitud son significativos. Como hemos sostenido en el pasado, Alemania necesita invertir más y ahorrar menos, y en comparación con sus homólogos del G7 se encuentra en la rara posición de disponer de un amplio margen para hacerlo". "Aunque se necesitan más detalles para evaluar adecuadamente el impacto de los cambios en la economía y cuál podría ser el déficit fiscal, a primera vista parece que la mayor parte del impacto potencial sobre el crecimiento se dejará sentir con cierto retraso, ya que la inversión tarda en materializarse", apunta Villaroel, señalando que "una estimación aproximada de JP Morgan sugería que el déficit podría alcanzar el 5,5% del PIB".
Dentro de las firmas que se han visto más favorecidas por las nuevas noticias políticas destaca el 17,5% que se anota la cementera Heidelberg Materials, uno de los más importantes a nivel global. También la banca es uno de los sectores más favorecidos, con entidades como Deutsche Bank y Commerzbank, revalorizándose un 12,4% y un 11% respectivamente en tan solo una jornada. Mientras, la química BASF conseguía un 10,7% de subida, seguida por la multinacional de ingeniería Siemens, que lograba anotarse un 8,6% de ascenso.
El resto de Europa
Mientras, el resto de Europa intenta seguirle el ritmo, aunque con unos compases un poco más lentos. La referencia europea, el EuroStoxx 50, junto con la bolsa de Milán, el FTSE Mib, se anotaron un 2% respectivamente a lo largo de la sesión. Esto deja a ambos índices con subidas anuales por encima del 12%, en el caso del selectivo continental supera el 12,1%, frente al 12,7% que alcanza el italiano. De esta manera, el EuroStoxx 50 se queda a menos de un 1% de recuperar sus máximos históricos: los 5.540 puntos, niveles por encima de los antiguos topes de la burbuja puntocom.
Por su parte, el Cac 40 avanza un 1,6% en esta sesión, empujando su cotización anual hasta el doble dígito de subida, por lo que consigue anotarse un 10,7% en lo que va de año, frente al 9% con el que cerró la sesión del marte. Aunque la bolsa española es de las menos alcistas del día, con un 1,4%, su subida en el año es la segunda mayor de todo el continente, al alcanzar el 14% de revalorización. Mientras, el FTSE 100 británico cede ligeramente en la sesión y consigue un 7,1% de ascenso en el año.
Estos ascensos llegaron tras una sesión de correcciones generalizadas en las bolsas a ambos lados del Atlántico, aunque especialmente en esta orilla, por la última ola de aranceles a los bienes importados, que ahora también impondrá a los productos agrícolas. Y a pesar de que Wall Street empezaba la sesión con subidas ligeras, al cierre de la sesión europea se daban la vuelta y cotizaban con pérdidas ligeras, la más marcada fue de la referencia, el S&P 500, con un 0,4% de cesión. En el año la tendencia imperante es la de los bajistas, con el Nasdaq liderando los descensos, que superaba el 3,2% al cierre. Mientras, el S&P 500 cedía un 2,2% este año y el Dow Jones aguantaba en positivo, con un 0,2%.
El euro en máximos de julio de 2024
Por su parte, el euro ha visto una revalorización del 4% esta semana, que con el último empujón de Alemania llevó al tipo de cambio frente al dólar a los 1,076 billetes verdes. Estos son niveles no vistos para la moneda europea desde julio de 2024, lo que aleja las expectativas de paridad entre ambas monedas, las cuales empezaron a hacerse eco en los parqués el año pasado.
Y si se compara con los datos en los que inicio este año, en los 1,0356 dólares, esto supone una subida por encima del 4%. Además, a principios de enero, el dólar consiguió su mayor fortalecimiento frente a la divisa supranacional, dejando el cambio en 1,024, niveles no vistos desde noviembre del año 2022.