
Me temo que este 2025 se presentará lleno de desafíos y volatilidad en los mercados, y más que nunca será necesario tener una alta dosis de paciencia para poder afrontarlo del mejor modo posible. De hecho, si escribiera la carta a los Reyes Magos, lo que les pediría sin ningún tipo de duda es paciencia para esperar a que se forme un nuevo terremoto en las bolsas, antes de decidir disparar la munición que espero que tengan si semanas atrás siguieron mi recomendación de reducir su exposición a bolsa cuando el Russell 2000 alcanzó su zona de altos históricos del 2021. En concreto, les sugerí, a modo de ejemplo, pasar de cada 100 mil euros invertidos a 75.000.
Con esa liquidez, espero que hayan podido disfrutar mucho más tranquilos de las fiestas navideñas y de las explosivas subidas que han tenido muchos de los títulos de corte disruptivo que desde agosto les invito a considerar, aprovechando la labor de investigación que realizo para conformar la cartera de mis mellizos. Les prometo que para este 2025 seguiré con la línea de artículos sobre este tipo de compañías, de las que soy plenamente consciente de que tienen un atractivo innegable. Es algo cautivador buscar compañías cuyos negocios puedan ser el futuro. Como siempre digo, aquellos que compraron 300 dólares en acciones de Apple hace 20 años ahora tendrían más de 300.000.
Volviendo al mercado, les digo que el terremoto que espero para volver a comprar con fuerza bolsa me gustaría que fuera similar a la caída de julio de 2024, cuyo clímax fue el 5 de agosto. Esto podría llevar al S&P 500 hasta los 5.500 puntos y al Nasdaq 100 hasta los 18.600 puntos, lo que, por cierto, supondría una caída del 10% desde los últimos máximos de 6.100 puntos en el S&P 500 (regla del 10%).
Si se alcanza ese entorno de 5.500 puntos en el S&P 500, nivel que iré modificando si hay más subidas a corto plazo, recomendaría comprar bolsa estadounidense con los ojos cerrados, anticipando un nuevo impulso alcista que buscaría nuevos máximos históricos.
Para 2025, además de destinar un 10% a compañías disruptivas con una visión a 20 años, quiero seguir centrándome en la búsqueda de oportunidades dentro de los zafiros, más concretamente dentro del TOP 50 de zafiros, donde se encuentran las mejores 50 compañías por fundamentales y recomendaciones, y que son candidatas a incorporarse al fondo asesorado por elEconomista Tressis Cartera ECO 30. Observo que 20 son europeas, mientras que las otras 30 proceden de fuera del Viejo Continente. Esto equivale a un 40% en Europa frente a un 60% en mercados globales, con una clara inclinación hacia Estados Unidos y Asia.

En cuanto a sectores para 2025, les recomiendo estar especialmente atentos al sector de la salud, donde detecto oportunidades muy atractivas y que no me sorprendería que superara al índice. Dentro del TOP 50, los zafiros que vigilo son: Exact Sciences Corporation, Neurocrine Biosciences y la alemana Fresenius SE & Co. KgaA. También me fijo en el sector de materiales, con un exponente dentro del TOP 50 como la empresa especializada en envases y embalajes Verallia, o en bienes de consumo como Société BIC, que recientemente he recomendado comprar.
¿Y qué pasa con el mercado español?
En el último estratégico les indicaba que el soporte clave a corto plazo para el IBEX 35 se situaba en los 11.150/11.300 puntos, equivalente a los 39.300 puntos del Ibex con Dividendos. Por esa zona discurre la directriz alcista que ha guiado los ascensos desde octubre de 2022. Pues bien, el alcance de esta directriz lo vi como una invitación para mandar una alerta en Ecotrader para comprar de nuevo bolsa española, insistiendo en que toda compra realizada en ese entorno debería ser cerrada si el Ibex con Dividendos pierde los 39.300 puntos.
Si eso sucediera, la amenaza sería asistir a una profundización de la corrección hacia los mínimos que marcó el Ibex 35 en agosto, en los 10.300 puntos, que podrían coincidir con los 5.500 del S&P 500. Hasta que no lleguemos a esos niveles, no sería partidario de volver a comprar bolsa española.
Para terminar, recuerden que la clave será la paciencia. Como dice un refrán bélico que suelo repetir: "Es mejor ser francotirador que pistolero". Este 2025 promete ser un campo de batalla en los mercados, pero con la estrategia y el enfoque adecuados, también puede ser un año lleno de oportunidades.