
La transformación de Cellnex de una compañía de crecimiento inorgánico y alto apalancamiento en otra de crecimiento orgánico, recurrencia de ingresos y dividendo sigue su curso. Este ha sido el gran objetivo de la empresa en los últimos dos años y, tras alcanzar este mes de marzo el ansiado grado de inversión por parte de S&P, ha puesto el foco en la distribución de dividendos, hasta ahora prácticamente olvidada.
En su último Capital Markets Day se comprometió a repartir 3.000 millones en dividendos entre 2026 y 2030, lo que supone multiplicar por 10 la retribución actual. El gran salto en los pagos se espera, por tanto, dentro de dos años, para el cual el consenso de analistas que recoge FactSet ya estima un dividendo por acción de 0,74 euros, lo que a precios actuales alcanza una rentabilidad del 2,3%. Estas cifras superan incluso a las prometidas en marzo y es que el crecimiento orgánico, unido a las desinversiones primero de Irlanda y ahora de Polonia, acelerarán el paso estipulado por la catalana.
En su próxima presentación de resultados "veremos qué comentarios hacen al respecto del cobro de la venta de activos en Irlanda y si hay alguna novedad respecto a la posible venta de los activos en Austria donde no es descartable que se pudieran obtener unos múltiplos algo inferiores a los objetivos en las últimas transacciones, ya que se trata de un activo con un crecimiento más limitado. Estas dos ventas consideramos que podrían ser claves para el inicio de un programa de recompra de acciones como ya apuntaron en su CMD de marzo", explican en Renta 4.
En el mencionado Día del Inversor estableció el importe inicial de 500 millones y el crecimiento anual del 7,5% para los dividendos. Sin embargo, la compañía espera poder destinar otros 7.000 millones a mejorar adicionalmente la retribución con estas recompras de acciones y dividendos extraordinarios si no hay operaciones.
"A pesar del elevado apalancamiento, la deuda está bien estructurada con un vencimiento medio superior a 6 años y gran parte de la deuda a tipo fijo, lo que le permitirá cubrir los vencimientos de deuda con su propia generación de caja y ventas de activos y mantener los costes de financiación por debajo del 2,6% hasta 2027", señalan en Bankinter.
Precisamente este crecimiento orgánico será el que le llevará a salir de las pérdidas el año que viene. El consenso de analistas estima que Cellnex obtendrá un beneficio neto de 20 millones de euros en 2025 frente a los casi 300 que perdió el curso pasado. "Hay una elevada visibilidad de los flujos de caja, con crecimientos próximos al 9% anual que le permitirá también seguir reduciendo apalancamiento", concluyen en Bankinter.
Un potencial del 36%
Los títulos de Cellnex ceden un 9% en lo que va de año. Sin embargo, al guardar una correlación tan alta con la renta fija, en los últimos meses se encuentra rebotando entre los 30 y los 35 euros a medida que los bonos suben y bajan, y las expectativas de recortes de tipos se calientan o se enfrían.
Los analistas también han mantenido sus valoraciones en los últimos meses y estas, de media, ahora se encuentran sobre los 44 euros por acción, lo que le deja un recorrido al alza de casi el 36% desde los niveles actuales.