
En las últimas semanas, los títulos de Cellnex están recuperando parte del terreno que llevaban perdido en bolsa este año. De hecho, ya se acercan a la zona de los 35 euros por acción y, por tanto, a borrar las pérdidas que acumulan este año. Y es que pese a ser una compañía a la que la inflación le va bien (al tener ligados sus contratos a este indicador), para los inversores los altos tipos de interés y, sobre todo, las expectativas que haya en torno a ellos es un factor determinante a la hora de decidir sus posiciones en la torrera.
Desde los mínimos del año, alcanzados en abril, por debajo de los 29 euros, se anota casi un 18%. En este mismo tiempo el bono americano a 10 años ha pasado del 4,7% al 4,4%, reflejando la altísima correlación que hay entre estos dos activos.
Sin embargo, desde Berenberg señalan que "las torreras europeas ahora se están desligando de lo que son las decisiones de la Reserva Federal ya que cada vez más el camino de esta y del BCE se están desviando". El mercado espera que la institución monetaria europea rebaje en 200 puntos básicos los tipos de interés antes de acabar el año y la entidad alemana calcula que "por cada 25 puntos que bajen la referencias de la renta fija a largo plazo en Europa, tanto Cellnex como Inwit [la torrera italiana] deben subir un 5% en bolsa".
"Asimismo, los menores costes de interés que pagarán estas compañías a partir de ahora permitirán a estas firmas ser más ambiciosas con sus planes de inversión, así como la política de recompras de acciones, lo que también apoyará sus subidas en bolsa", agregan desde Berenberg. "Esta correlación no se justifica, ya que la mayoría de la deuda de Cellnex está a tipo fijo y sin vencimientos importantes a corto plazo", siguen.

Así, los analistas de la casa alemana estiman que Cellnex podría incrementar considerablemente su remuneración al accionista en los próximos años. El consenso prevé que hasta 2026 reparta 800 millones frente a los 2.100 que calculan en Berenberg, lo que supone en torno a un 9% de su capitalización actual.
En este contexto, los analistas esperan que pueda seguir recuperando terreno en bolsa y, de cara a los próximos 12 meses, fijan su precio objetivo en los 44,25 euros, lo que le deja un recorrido al alza de más del 26% desde los niveles actuales. Con el cambio de Berenberg, que ha pasado de recomendar mantener a comprar, ya 3 de cada 4 casas de análisis se enmarca en esta estrategia, colocando a la catalana como uno de los mejores consejos de toda la bolsa española.
Sus resultados del primer trimestre confirmaron el camino adelantado en el último Capital Markets Day, celebrado a finales del año pasado, donde mantuvieron el crecimiento de los ingresos orgánicos y avanzaron la operación de venta de sus torres en Austria. "El Día del Inversor puso de manifiesto los sólidos fundamentales como líder europeo de torres, la visibilidad de los flujos de caja y la sólida posición financiera, con un vencimiento medio superior a 6 años y mayoritariamente a coste fijo, que le permitirá mantener el coste de financiación estable por debajo del 2,6%", explican desde Bankinter.
El consenso de analistas que recoge FactSet prevé que cierre este curso con un apalancamiento de 6,2 veces, consiguiendo, además, el primer flujo de caja libre positivo desde 2017. No obstante, no será hasta el año que viene cuando abandone las pérdidas netas, según estas mismas estimaciones.