
A pocas sesiones de culminar la primera mitad del año, el balance bursátil no es precisamente positivo para Bankinter y Unicaja, que se colocan entre las diez firmas del Ibex que más pierden en este intervalo. Y es que, lo que prometía ser el año de la banca se truncaba en el mes de marzo con las quiebras de SVB, primero, y Credit Suisse después, que desataban una tormenta en el sector bancario que ha golpeado con mayor dureza a estas dos entidades, que son las que más pierden desde entonces en bolsa junto con Banco Sabadell.
El castigo que acumulan Bankinter y Unicaja en el ejercicio en curso se explica, en parte, por la mejor evolución que han tenido en los dos cursos pasados, en los que su revalorización se acercó al 40%. El caso de la entidad dirigida por María Dolores Dancausa –que regresa al Eco10 una década después– sorprende en mayor medida a los expertos, ya que esta corrección no se justifica ni en su cuenta de resultados –que batían las expectativas del mercado–, ni en la confianza que los expertos depositan en la firma, con un alza del 19,7% en la previsión de beneficios netos para 2023 con respecto a la que pronosticaban el primero de enero, que deja a Bankinter con uno de los multiplicadores más atractivos de su historia. Así, otro de los motivos que señalan los expertos del castigo bursátil de Bankinter es el contagio que ha sufrido por la caída de los bancos regionales estadounidenses.
"Los principales motores de beneficios de Bankinter incluyen la capacidad del prestamista para mantener el impulso del crecimiento de los ingresos a medida que disminuyen los vientos de cola del margen de intereses (NII), al tiempo que mantiene bajos los gastos de crédito", indican desde Bloomberg Intelligence, y añaden que, aunque el margen neto de intereses del banco podría alcanzar su punto máximo a finales de 2023, "el mantenimiento de unas ganancias de los préstamos de un dígito medio a alto podría permitir continuar expandiendo el margen neto de intereses, mientras que una franquicia de gestión de patrimonios saludable podría respaldar un crecimiento constante de las comisiones a medida que el mercado mejore".
Unicaja, que sigue sumida en sus problemas de gobernanza, sí que decepcionaba con unos resultados del primer trimestre del año inferiores a los esperados por el conseso. Tanto su recomendación como la estimación de ganancias para este año se han visto afectadas, con un deterioro del consejo –los expertos siguen recomendado tomar posiciones en la firma, aunque tiene la peor recomendación desde marzo de 2020–, y una reducción del 4% en los beneficios previstos para 2023, que le convierten en el único banco español que recibe un tijeretazo en este sentido.
Desde Deutsche Bank, sin embargo, arrojan algo de luz a la evolución de la firma y esperan un empujón en los próximos meses: "Creemos que la próxima mejora (especialmente en el NII en 2023, pero con una mayor de los activos) permitirá gradualmente una cierta recuperación de la rentabilidad, con un RoTE hacia el 7-8%".
BBVA se 'cuela' entre las más alcistas
Justo al otro lado de la tabla está BBVA, que se coloca, con un 19,6%, como la octava firma más alcista del Ibex en estos seis meses del año. Esta fortaleza la demuestra también tras la crisis bancaria que sacudía a las entidades en marzo, ya que es la que menos recorrido tiene por delante (un 8%) para borrar las pérdidas ocasionadas por este bache. En el mismo periodo, Sabadell se sitúa en el puesto 12 del tablero, Santander en el 16 y CaixaBank en el 25, con una tibia subida del 0,85%.