El mal comportamiento del mercado este año ha provocado una escabechina también en los fondos de inversión, un producto en el que está invertido el 14,4% del ahorro financiero de las familias españolas. A cierre de noviembre, el conjunto de estos vehículos perdía un 6,74% de media este año, que va camino de ser el peor para la industria en términos de rentabilidad desde 2018, según datos de Inverco. Si se desglosa esta cifra, únicamente el 7% de los fondos de bolsa a la venta en España (en euros) gana dinero este año, según Morningstar, frente al 4% que lo consigue en renta fija.
Dentro de los de renta variable, la categoría que más se ha revalorizado este año es la de la bolsa turca, en la que se pueden encontrar fondos con rentabilidades de tres dígitos. "En un año en el que la inflación en Turquía se ha disparado por encima del 80%, y el banco central ha adoptado la estrategia poco convencional de recortar los tipos en lugar de subirlos para combatir las presiones sobre los precios, la divisa ha caído un 30%. Se esperaría que un país en crisis generara escasa rentabilidad para los inversores", reflexiona Álvaro Antón Luna, country head de abrdn, y, sin embargo, "los extranjeros que invierten en renta variable turca en dólares han obtenido la mejor rentabilidad de los mercados mundiales de renta variable, impulsados por un aumento estratosférico de los beneficios por acción del índice", añade.
Sector energético y Brasil
Tras esta categoría, la segunda más alcista este ejercicio invierte en cotizadas del sector de la energía, y consigue subidas medias que rozan el 36%. Seguirían los fondos que buscan oportunidades en compañías ligadas a las materias primas, los que se centran en la bolsa de Brasil, que es una de las más baratas de cara a 2023 y tiene una alta vinculación a los precios de las commodities, y también aquellos que amplían el foco a la renta variable de América Latina en general. Por contra, la categoría que más retrocede en el año dentro de la renta variable es la que se centra en las cotizadas suecas de pequeña y mediana capitalización, que pierde, de media, un 37,5%.
De 'estrellados' a estrellas
En los fondos de renta fija, que atraen las mayores suscripciones este año, superiores a los 14.000 millones de euros, el ejercicio también ha sido difícil de encajar ante el gran reajuste que se ha producido en el precio de los bonos para adaptarse a la nueva era de tipos más altos dibujada por los bancos centrales ante el regreso de la inflación. Los más de 1.900 fondos de inversión de renta fija en euros a la venta en España pierden, de media, un 10,3% este año, cinco puntos menos que los fondos de renta variable, según datos de Morningstar. Así, por ejemplo, la categoría de deuda pública pierde un 15% este año, mientras que la de la renta fija corporativa cae cerca de un 13%.
Entre los fondos centrados en bonos que suponen una excepción a un año de caídas hay productos que consiguen rentabilidades superiores al 6%. Los dos que ofrecen mayores rendimientos tienen en común que invierten en deuda brasileña.
Aunque el daño a las carteras ya está hecho, la parte positiva es que "los inversores en renta fija tienen buenos motivos para esperar una mejora en 2023", valora Eoin Walsh, Partner, Portfolio Management, TwentyFour Asset Management. "Aunque pensamos que es poco probable que veamos una recuperación en cadena como la que tuvimos de abril de 2020 hasta mediados de 2021, por ejemplo, dados los yields actuales, creemos que los mercados de renta fija están bien situados para generar rentabilidades positivas en 2023", opina.
Según la última encuesta de Bank of America, los gestores prefieren los bonos a la bolsa y los sobreponderan en sus carteras por primera vez desde 2009.
