
El 'culebrón' surgido esta semana en torno a la plataforma de trading de criptoactivos FTX ha dejado en las últimas horas un nuevo capítulo. El CEO de la firma, Sam Bankman-Fried, ha avisado de que, sin una inyección de efectivo, la empresa tendría que declararse en quiebra.
Esta voz de alarma del conocido como 'Warren Buffett' de las criptomonedas se conoce justo cuando Binance, competidora de FTX en el sector, ha anunciado que renuncia a la compra de su rival precisamente por la acuciante falta de liquidez que sufre y las dudas generadas.
En una conferencia con inversores este miércoles por la tarde, justo antes de que Binance diera un giro y abandonara su oferta de adquisición, Bankman-Fried informó de que su plataforma se enfrentaba a un 'agujero' de hasta 8.000 millones de dólares y que necesitaba 4.000 millones de dólares para seguir siendo solvente, ha revelado una fuente anónima, según informa Bloomberg. FTX está intentando conseguir financiación de rescate en forma de deuda, capital o una combinación de ambos.
"La he cagado", dijo Bankman-Fried a los inversores en la llamada, según personas con conocimiento de la conversación. El CEO dijo que estaría "increíblemente, increíblemente agradecido" si los inversores pudieran ayudar. Desde FTX se ha declinado hacer comentarios al respecto.
El reconocimiento de los crecientes problemas y las limitadas opciones de su empresa es un giro sorprendente para el antiguo 'niño prodigio' de la industria de las criptomonedas, que llegó a valer 26.000 millones de dólares y a ser comparado con John Pierpont Morgan, legendario banquero de principios de siglo y fundador de su banco homónimo. También subraya la incertidumbre que pesa sobre FTX, sus clientes y los mercados de criptomonedas. El bitcoin cayó a los 16.000 dólares, el mínimo en dos años, tras el anuncio de Binance.
La suerte de sus inversores y prestamistas, así como la de todos los que no han podido recuperar los activos de sus clientes desde que se interrumpieron algunas retiradas de fondos a principios de esta semana, están en juego. La quiebra de las empresas de criptomonedas Celsius y Voyager supuso la inmovilización de miles de millones de dinero de clientes en procedimientos de quiebra.
FTX cuenta con una destacada lista de patrocinadores, como Sequoia Capital, BlackRock, Tiger Global Management y SoftBank Group. Sequoia redujo el valor total de sus participaciones en FTX.com y FTX.us, lo que indica que la empresa no ve un camino claro para recuperar su inversión.
Sin embargo, Bankman-Fried se mantuvo desafiante durante un período agitado de aproximadamente 24 horas que incluyó la creciente especulación de que Binance no seguiría adelante con el acuerdo. En repetidas ocasiones dijo a los inversores durante la conferencia telefónica de este miércoles por la tarde que simplemente no era cierto que Changpeng Zhao, CEO de Binance, estuviera abandonando la adquisición. Alrededor de una hora más tarde, Binance dijo que efectivamente se estaba retirando.
"Nuestra esperanza era poder apoyar a los clientes de FTX para proporcionar liquidez, pero los problemas están más allá de nuestro control o capacidad de ayuda", argumentó Binance en un comunicado. Zhao había dicho en un memorándum más temprano el miércoles que no había un "plan maestro" para hacerse cargo de FTX, y que "la confianza de los usuarios está gravemente afectada."
El director ejecutivo de Coinbase, Brian Armstrong, dijo el martes en una entrevista con Bloomberg TV que si el acuerdo con Binance se caía, probablemente significaría que los clientes de FTX tendrían pérdidas. "Eso no es algo bueno para nadie", dijo.
Por si esto fuera poco, la situación de FTX está llamando la atención de las autoridades estadounidenses. La Comisión de Valores y Bolsa (SEC) y la Comisión de Comercio de Futuros de Materias Primas están investigando si la empresa manejó adecuadamente los fondos de los clientes, así como su relación con otras partes del imperio de criptomonedas de Bankman-Fried, incluyendo su casa de operaciones Alameda Research.
De hecho, el regulador ha pedido a Tether, emisor de la stablecoin que lleva ese nombre, que congele los fondos que tiene en FTX temporalmente para que se pueda llevar a cabo la investigación, según ha confirmado una fuente de la compañía a CoinDesk. Eso afecta a 46 millones de dólares que quedan bloqueados hasta nuevo aviso. Esta petición de la SEC podría no ser la única y se podría haber hecho la misma solicitud para otras carteras de criptomonedas, lo que implicaría que cientos de millones quedarían inmovilizados.