
Como si de un funambulista se tratase, las bolsas de Europa caminan en las últimas horas sobre el alambre. Las nuevas amenazas del presidente de Rusia, Vladimir Putin, y el anuncio por parte de la Reserva Federal de EEUU de otra subida de tipos de 75 puntos (hasta máximos de 2008) en el precio del dinero, han dado nuevas ínfulas a los osos en los mercados de renta variable de occidente.
Los números rojos volvieron a extenderse por los parqués de uno y otro lado del Atlántico en la sesión del jueves, favoreciendo que Europa cediese primeros soportes, los cuales eliminan la hipótesis alcista de ver un rebote mayor y dejan solos ante el peligro a la versión Total Return del mismo índice y al Dax, que todavía aguantan sus respectivos suelos clave, según explica Joan Cabrero, asesor de Ecotrader. En este sentido, si sucede esto, la interpretación es que estaría cotizando un escenario duro de estanflación más que la recesión técnica de la que se habla hasta el momento.
Los 3.450 puntos del EuroStoxx 50 eran el primer nivel que señalado desde Ecotrader como clave en el devenir alcista de las bolsas continentales de cara a las próximas semanas y ayer se cedieron, como ya había sucedido en alguna de las últimas sesiones.
El Dax alemán por su parte aguanta sobre los 12.400 puntos, nivel que se encuentra a cerca de un 3% de los niveles de cierre de la jornada de ayer y el Ibex 35 ha logrado permanecer por encima del soporte clave que de los 7.765 puntos.
"Perder esos niveles significa que las posibilidades de que podamos asistir a un contraataque alcista se desvanecen, favoreciendo ahora que hay que atender solo al resto de soportes y no mirar objetivos más allá", señala Joan Cabrero, quien advierte precisamente que la pérdida de dichos niveles de manera generalizada abriría la puerta a asistir a cesiones adicionales en los índices de referencia en Europa cercanas al 10%.
También hay que vigilar los 7.500 enteros del EuroStoxx 50 en su versión Total Return, que es la que contempla la reinversión de los dividendo; los 12.400 puntos del Dax y, en el caso del Ibex 35, los 7.765 puntos, "que en este caso no son los mínimos de marzo y julio, pero son los niveles análogos", especifica el experto. Se trata de los mínimos de marzo y "ya en julio también frenaron las caídas en las bolsas europeas", explica el analista del portal premium de elEconomista.es, quien resalta también que para tomar decisiones operativas es preferible ver una pérdida generalizada de estas referencias más que la cesión puntual de un único indice.
Recesión técnica o estanflación
Parece claro, por tanto, que la pérdida de estos niveles -los 7.500 puntos del EuroStoxx 50 Total Return, los 7.765 puntos del Ibex 35 y los 12.400 del Dax- y la consiguiente caída del 10% en el mercado, lo que descontaría es la probabilidad de ver un escenario de estanflación en Europa y EEUU (aceleración de la inflación coexistiendo con tasas de crecimiento reducidas) durante un periodo de tiempo prolongado, en vez de pensar en un contexto de recesión técnica, que es el que se descuenta en los niveles actuales de cotización y que supondrían ver crecimientos negativos probablemente solo durante el último trimestre de este año y el primero del que viene.
En este contexto, las decisiones que tomen los bancos centrales en las próximas reuniones de política monetaria se antojan clave para que las bolsas se decanten por uno u otro escenario. "La demanda doméstica en Europa en últimos veinte años demuestra que no da para tener unos tipos tan elevados como en Estados Unidos. Ahora, además, el endeudamiento es muy alto y esa deuda hay que pagarla y si sale más caro pagarla por el alza de los tipos, hay menos potencial de crecimiento. Si suben más los tipos en Europa sería más caro financiarse y la economía no lo aguantaría", señala Miguel Jiménez, gestor de fondos mixtos de Renta 4 Gestora, quien vaticina que "de cara al próximo ciclo económico, vamos a tener tipos no muy altos respecto a los que hemos tenido en 2010-2020, y no los vemos al 4%-5% en Europa".
Schroders ve "optimista" pensar que a estas alturas se puede evitar una recesión
Desde la gestora señalan, además, que un precio del dinero más elevado a corto plazo supone un riesgo de recesión a medio y largo plazo que regiones como el Viejo Continente no se pueden permitir. No en vano, demografía y productividad han sido históricamente clave para que Europa genere crecimiento y "ahora no estamos especialmente bien en ninguna de las dos", explica Jiménez.
"Es optimista pensar que se puede evitar una recesión y, en nuestra opinión, cualquier posibilidad de un aterrizaje suave se ha esfumado", destaca George Brown, economista de Schroders a raíz de la última comparecencia del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell.
"Creemos que será necesaria una recesión para controlar la inflación y prevemos que la economía estadounidense se contraiga en torno al 1% en 2023. Subir los tipos hasta el entorno del 4% debería ser suficiente para lograr el objetivo, y hay indicios de que el endurecimiento de las condiciones financieras está empezando a surtir efecto. Todos nuestros seis indicadores monetarios de recesión, excepto uno, están en rojo", añade. Y más tras las declaraciones del propio mandatario de la Fed y de las previsiones de la entidad, que destacan que la probabilidad de un aterrizaje suave de la economía habían disminuido.
El euro busca un rebote ante el dólar sin éxito
La del jueves fue una sesión de vaivenes para el euro/dólar. Tras ahondar durante los primeros instantes de la sesión en sus mínimos del ejercicio (y de los últimos 20 años) el par recuperó el terreno cedido para después volverlo a perder. "Para pensar en que un rebote pueda ser sostenible debería batir los 1,02 enteros", afirma Cabrero, algo poco factible dada la fortaleza del 'billete verde' en las últimas sesiones en las que ha revalidado sus máximos frente a sus cruces más negociados, incluido el yen.