La guerra en Ucrania es un drama humanitario cuyas consecuencias aún están por ver también en el plano económico. En este entorno en el que el mercado también se resiente por los estragos del conflicto, varios países se replantean aumentar sus presupuestos en materia de defensa. Esto, junto a las armas que se están enviando para combatir al ejército ruso, ha levantado las previsiones de beneficios para 2022 de las grandes compañías del sector dedicadas a la fabricación y diseño de armamento un 10% de media desde que Putin inició su campaña bélica.
Y eso que esta industria, fuertemente ligada a la innovación tecnológica, acusa los mismos vientos en contra que los valores dentro del Nasdaq, por ejemplo, como puede ser la falta de componentes electrónicos.
Obviamente, existen grandes diferencias entre ellas. Boeing es de las pocas entre las más grandes por capitalización de mercado que sufre un severo recorte de lo proyectado para este año por el consenso de mercado recogido por FactSet. Aunque se puede incluir dentro de la categoría de compañía dedicada a la fabricación de material defensivo (que no deja de ser armamento) esta rama no llegó a suponer el 30% de su actividad en el ejercicio de 2021. Además, el mercado rebajó el beneficio estimado para Boeing hasta los 915 millones de euros por los problemas que arrastra la compañía con su modelo 737 Max. De hecho, su línea de defensa es la que más despuntó en los resultados trimestrales hasta marzo de este año.

Salvando este caso, la mayoría de las armamentísticas saca provecho de la inestabilidad geopolítica con la alemana Rheinmetall a la cabeza. El consenso de mercado ha elevado desde que arrancó el conflicto en febrero casi un 20% el beneficio que se espera de compañía para este año. Rheinmetall vive un momento dulce, con la reducción de su exposición a la industria del automóvil, que no fue muy fructífera, según la analista de Bloomberg, Gillian Davis. Ahora, de vuelta en el negocio del armamento casi al 100% "la compañía se está convirtiendo en un valor defensivo, tanto por el margen de beneficio prometido del 10% hasta 2025 como por su cartera de pedidos", según la experta. Además, recientemente, la empresa solicitó al gobierno alemán exportar un lote de tanques Marder a Ucrania, aunque este ha dado evasivas al respecto hasta ahora.
Pero no es la única europea que ha visto mejorar lo proyectado para 2022 desde que comenzó la invasión rusa. La naviera norteamericana Huntington también mejorará un 10% su resultado neto este año y la francesa Dassault, como Indra, auguran un 8% más de beneficio que lo que se esperaba en enero.
Esta mejora de las previsiones de la cuenta de resultados tiene su reflejo en las recomendaciones del consenso de mercado, donde no existe un consejo de venta mayoritario entre las grandes de la industria, según FactSet. Además, todas ellas tienen recorrido por delante en el mercado, incluyendo a Boeing, con un potencial del 75% a pesar del recorte que sufre el precio de su acción en bolsa en el año. Pero si alguna destaca en su cotización es, de nuevo, Rheinmetall. La compañía no solo es la más alcista entre sus comparables al subir casi un 140% en el año, sino que también lidera el índice europeo Stoxx 600 en el cual de los diez valores que más suben en 2022 cuatro tienen negocio en la fabricación o venta de material militar.
Indra, entre las más baratas
Para el consenso de mercado, la española es un activo atractivo dentro del sector. Su posición de contratista de referencia en el continente juega a su favor. "La compañía ha reiterado todas las cifras de su guidance y consideramos que se ve directamente beneficiada del incremento del gasto en defensa de los países de la UE [con un 25% de exposición al sector] debido al conflicto armado entre Rusia y Ucrania", explican desde Bankinter mientras que apuntan a que los beneficios de todo lo anterior se notará más en el largo plazo.
Así, Indra se encuentra entre las más barata según su PER (veces que el beneficio queda recogido en el precio de la acción) solo por detrás de Leonardo y con un multiplicador casi en la mitad de la media (tiene un PER para 2022 de 10 veces frente a los 20 del conjunto de la muestra, descontando a Boeing por ofrecer un ratio elevado dado su recorte de beneficios). Además, de su recomendación de compra, el consenso de mercado estima que tiene un recorrido en bolsa del 27% hasta su precio objetivo en los 12,8 euros.