El consejero delegado de JPMorgan Chase, Jamie Dimon, es una de las voces de Wall Street que ya se están preparando para la posibilidad de que la Reserva Federal suba los tipos de interés mucho más de lo que el mercado está descontando actualmente, y advierte de que el endurecimiento de la política no será necesariamente tan "dulce y amable" como algunos podría esperar. Dimon aseguró a los analistas el viernes que la Fed podría aumentar los tipos hasta siete veces para combatir el aumento de la inflación, aunque no especificó cómo de rápida sería la subida.
Los operadores del mercado ya han aumentado sus expectativas de que la Fed endurezca su política monetaria este año, ya que el banco central ha reiterado su compromiso de luchar contra la inflación "haciendo lo que sea necesario" si los datos no mejoran pronto. Los mercados de swaps actualmente indican una expectativa de entre tres y cuatro aumentos de un cuarto de punto para este año y alrededor de seis para finales de 2023.
"Espero más aumentos en los tipos de interés de lo que está implícito en la curva", dijo Dimon el viernes en una conferencia telefónica con analistas después de que JPMorgan publicara sus resultados del cuarto trimestre. "Mi opinión es que hay muchas posibilidades de que haya más de cuatro. Podrían ser seis o siete".
La perspectiva de cuatro aumentos en 2022 parece cada vez más probable. Un grupo creciente de bancos están cambiando ya sus pronósticos oficiales para reflejar este creciente consenso. Y aunque los mercados aún no se han movido para asimilar este punto porcentual de subida por completo, ya se están acercando y los inversores han estado muy activos para protegerse contra los riesgos de un ciclo más rápido de lo anticipado. Con la retórica agresiva de la Fed y los datos del IPC disparado publicados esta semana, la demanda de opciones de eurodólares para protegerse contra los aumentos de la Fed ha sido palpable, y algunos incluso contemplan la perspectiva de un aumento de medio punto en marzo.
"El consumo está muy fuerte" y las empresas "están en muy buena forma", dijo Dimon. "La mesa está bastante bien puesta" en términos de crecimiento "obviamente, con la inflación como punto negativo". También dijo que sería un error suponer que la economía no crecerá durante un período en el que los tipos de interés estén aumentando.
Con estos datos sobre la mesa, el CEO de JPMorgan expresó cierta sorpresa de que los bonos estadounidenses a largo plazo no hayan subido más. El rendimiento del Tesoro a 30 años actualmente ronda el 2,09%, aún dentro de su rango de la 'era de la pandemia', mientras que el avance de este mes en el bono a 10 años ha perdido fuerza desde que llegó al 1,81%, justo por encima de donde estaba a principios de 2020. En opinión de Dimon, los bonos más largos podrían reaccionar más a una reducción real de la hoja de balance de la Fed, el llamado ajuste cuantitativo. Ese es un proceso que aún no se ha anunciado, aunque se han adelantado las expectativas del mercado sobre cuándo tendrá lugar.
Subidas pendientes
Hace varios años, antes de que la pandemia descarrilara la economía mundial y obligara a los bancos centrales a tomar medidas de emergencia, Dimon ya estaba entre los que rechazaban la posibilidad de que los tipos subieran mucho más. En aquel entonces, advirtió de que el bono del Tesoro a 10 años en realidad debería estar alrededor del 4% y, de hecho, podría subir más aún. La pandemia, por supuesto, acabó con esa posibilidad, pero incluso antes de que llegara el coronavirus, el índice de referencia ya se había reducido a la mitad después de alcanzar un poco más del 3,25%.
La predicción actual del equipo económico de JPMorgan es que la Fed comenzará a elevar los tipos en marzo, antes de lo que espera la mayoría del mercado, y hará subidas trimestrales para el resto del año, una opinión de la que se han hecho eco varios bancos importantes como Deutsche Bank y Morgan Stanley. Mientras tanto, el pronóstico promedio de la Fed - el dot plot- es de 75 puntos básicos de ajuste este año, es decir, tres subidas.
Pero el hecho de que la Fed haya tendido a adoptar un enfoque gradual de endurecimiento en los ciclos recientes no significa que una aceleración esté fuera de los límites. En su análisis de las perspectivas políticas, Dimon se remontó a la era en la que el exjefe de la Fed, Paul Volcker, subió los tipos varios puntos porcentuales de una sola vez. "Toda esta idea de que va a ser dulce y amable y que nadie se va a sorprender nunca, creo que es un error", dijo.