
Las consecuencias de la burbuja formada en bolsa en torno a la industria de las energías renovables desde la pandemia por el impulso de los fondos de recuperación y la tendencia del ESG (inversión según criterios socialmente responsables) siguen manifestándose. Dos de las principales empresas de la industria cotizadas en España se hunden en mínimos del año, con Siemens Gamesa de vuelta a niveles de noviembre de 2020 tras perder un 24% en 2021, y Solaria en precios de septiembre tras retroceder un 40% desde el primero de enero.
En el suelo del presente ejercicio también se encuentran Soltec y Solarpack, y tampoco evitan fuertes pérdidas en el año Acciona, Audax o Grenergy, después de que la limitada demanda llevara a Capital Energy y a Opdenergy a cancelar sus saltos al parqué y del batacazo de Ecoener en su reciente estreno en bolsa.
Sí se producirá próximamente la OPV (oferta pública de venta) de Acciona Energía, la división de energías renovables del grupo de infraestructuras -a la espera del folleto-, para el que menos se han recortado las expectativas de beneficio neto dentro del sector de cara a los dos próximos años (2021 y 2022), desde que comenzó este ejercicio.
Apenas un 1,4% ha retrocedido la previsión media de ganancias de Acciona del consenso de analistas que reúne FactSet para este año y un 2,1% para el próximo. Mientras, a principios de 2021 se esperaba que el fabricante de aerogeneradores Siemens Gamesa perdiera 105 millones este ejercicio, y ahora se estima que el resultado negativo será de 138 millones. Para 2022, la previsión era de un beneficio 322 millones que ahora se queda en 238.
Presión sobre los márgenes
Sin embargo, la expectativa de ingresos se mantiene estable, por lo que aflora la presión que sufren los márgenes de la compañía hispanogermana (la capacidad de convertir los ingresos en ganancias) por distintos factores.
De hecho, el fabricante de aerogeneradores publicó a finales de abril un beneficio operativo (ebit) de 111 millones de euros para el periodo entre enero y marzo, por encima de las estimaciones, cercanas a los 90 millones, pero al mismo tiempo rebajó el rango alto del objetivo de ingresos para el conjunto del año, de los 10.200-11.200 millones de euros a 10.200-10.500.
Siemens Gamesa justificó este recorte de la guía en "retrasos en la entrada de pedidos y retrasos en la ejecución de algunos proyectos, imputables al cliente y al impacto de la pandemia".
Además, mantuvo el objetivo de margen operativo (entre el 3 y el 5%), "a pesar de presentar un 5% en el primer semestre del ejercicio 2021, en la medida que espera una menor contribución de proyectos offshore [instalaciones molinos en el mar] en el segundo semestre, que dejan más margen que el onshore [en tierra], y también mayores costes de aprovisionamiento ligados al incremento de precios de las materias primas y la reducción de los volúmenes", explica Alfredo del Cerro, analista de Banco Sabadell.
Detrás de las caídas de Siemens Gamesa en bolsa también está que a mediados de mayo se alejara el aliciente de una oferta pública de adquisición (OPA) de su matriz. La compañía desmintió tajantemente a mediados de mayo los rumores sobre una operación de exclusión por parte de Siemens Energy, que controla el 67% de su capital.
Ataques bajistas de los 'hedge funds'
En el caso de Solaria, las previsiones de beneficio aguantan mejor que en el resto del sector desde que empezó 2021, pero la volatilidad va unida irremediablemente a su ticker en bolsa.
Sobre su capital pesan apuestas bajistas (hedge funds que esperan ganar con sus caídas) por el 2,68%, que se elevan hasta el 6,15% en el caso de Audax, y se quedan en el 0,61% en Siemens Gamesa, en el 0,57% en Acciona, en el 0,53% en Soltec y en el 0,5% en Solarpack. Es el sector que más ataques de este tipo sufre en España.