Madrid
La pandemia del Covid podría haber sido un mal año para los fondos de inversión, pero la entrada en escena de las vacunas a partir de noviembre propició que los partícipes se replantearan el regreso a los vehículos de inversión colectiva, que terminaron el año incluso con captaciones netas de 1.163 millones de euros, cuando hasta finales de octubre perdían 800 millones, lo que les permite cerrar 2020 prácticamente al mismo volumen patrimonial con el que comenzaron el año pasado, en el entorno de los 277.000 millones, gracias a la recuperación de los mercados, según Inverco.
Esta revalorización ha sido aprovechada, sobre todo, por las gestoras de Kutxabank, Ibercaja y Bankia, que han conseguido terminar el pasado ejercicio con captaciones netas superiores a los 1.000 millones de euros. En el caso de la entidad vasca, ha logrado 1.271 millones, mientras que la firma zaragozana ha captado 1.166 millones. Bankia AM, por su parte, ha obtenido 1.013 millones de euros en suscripciones netas, y es el segundo año que consigue superar esta barrera patrimonial de los 1.000 millones, ya que en 2019 fue capaz de sumar 1.543 millones en entradas netas de dinero.
Fuente de inversores
Esta capacidad de la banca mediana por atraer nuevos partícipes a la inversion colectiva se debe a que todavía cuentan con un número importante de clientes que han dejado de contar con una remuneración en sus productos tradicionales, como los depósitos, debido a los tipos de interés bajo mínimos. Y esto les permite derivarlos hacia fondos muy conservadores o hacia la gestión discrecional de carteras, donde las firmas se garantizan el cobro de una comisión de aproximadamente el 1% del patrimonio, por decidir la asignación de activos.
Santander y Mutua, con 576 y 438 millones de euros, respectivamente, son las siguientes gestoras con más entradas netas de dinero durante el año pasado, en el que solamente 15 firmas de inversión consiguieron rebasar los 100 millones de euros en suscripciones netas, y únicamente 20 gestoras pudieron captar más de 50 millones.
Mediolanum, Dunas Capital y Orienta Capital –de la que Mutua ha adquirido el 40%– son las gestoras independientes más beneficiadas por la entrada neta de dinero, con 174 millones, 131 millones y 104 millones de euros, respectivamente.
Pero no todas las gestoras han tenido la misma suerte a la hora de retener o atraer dinero nuevo hacia sus fondos. La peor parte se la lleva BBVA, que ha visto salir casi 1.900 millones de euros netos durante 2020, según Inverco. Desde la gestora aclaran que estos movimientos se deben a reembolsos de sus fondos españoles, pero que el volumen sigue en manos de la entidad en productos de terceros. Según los datos definitivos de la asociación profesional, el banco azul perdió el año pasado 1.363,5 millones de euros netos en sus fondos globales, 504 millones en sus fondos de renta fija a corto plazo y 216 millones en sus fondos mixtos de renta variable.
Pero quienes peor salen retratados en cuanto a captaciones netas son las firmas independientes más reconocidas, bien porque sus clientes no encontraron el momento adecuado para invertir debido a la rápida y paulatina recuperación de los mercados después del 'crash' de marzo, bien por buscar otros fondos con mejor rendimiento. Bestinver, por ejemplo, ha sufrido 262 millones de reembolsos netos, mientras que Gesconsult ha perdido 197 millones por la salida de un inversor institucional de su fondo cuasi monetario.