
El crash sufrido por las bolsas en marzo por la expansión de la pandemia de coronavirus, el más violento de la historia, segó sin compasión las posiciones sobre las acciones de compañías de muchos inversores. Sin posibilidad de salir a tiempo en muchos casos, existen pocas opciones para limitar las pérdidas provocadas por un cisne negro en toda la contundencia de su propia definición: un acontecimiento inesperado que ha paralizado la actividad económica y transformado por completo los objetivos y expectativas de la mayoría de empresas. Un camino es aprovechar los rebotes para vender. Otro, exprimir la liquidez con la que se cuenta, a día de hoy todo un tesoro, y fijar niveles de recompra esperando una segunda oleada bajista para promediar precios.
Concepto maldito entre los profesionales de la inversión, abrir una segunda estrategia tras fracasar en un primer intento cobra sentido en un escenario como el actual, en el que la mayoría de expertos coincide en que todavía no se ha visto el peor momento de mercado y después de un desplome global solo comparable a las grandes crisis de la Historia: el crack del 29, octubre de 1987 o 2008.
elMonitor, la herramienta de inversión de elEconomista a nivel internacional, así lo plantea en compañías que mantienen sólidas recomendaciones de compra y ofrecen descuentos por valoración inimaginados pese a erigirse como líderes de sus respectivos sectores, como es el caso de IAG, Airbus, Deutsche Post o Banco Santander, o compañías ganadoras de la crisis, como las tecnológicas SS&C Tech, Atos o Alphabet. Compañías que ofrecen una solidez tal que invitarían a tomar posiciones, incluso, en los niveles actuales.
Compañías que mantienen sólidas recomendaciones, ofrecen descuentos inimaginados y que todavía se erigen como líderes indiscutibles de sus sectores
La recuperación de estos valores resulta incuestiobable en un mundo que avanza hacia la normalidad, ya sea el resurgimiento de la economía en V, en U o en el peor de los casos en forma de símbolo de Nike, y si sus acciones eran atractivas a precios previos al coronavirus, no es precisamente ahora el momento de renegar de ellas y menos a precios de derribo como los que señalan los analistas técnicos de elEconomista que son los óptimos para promediar y así acortar el plazo de la ansiada recuperación.
IAG: 1,55 euros
IAG ha recuperado el pulso en bolsa tras llegar a desplomarse algo más de un 70% desde los 7,88 euros en los que registró máximos anuales. Las acciones del grupo de aerolíneas rebotan cerca de un 30% ya desde los mínimos de la crisis del coronavirus, los 2,12 euros hasta los que llegaron a hundirse el 19 de marzo. Un precio que, de momento, es el del peor escenario, ante la casi total paralización de su actividad.
La reducción de la capacidad de IAG es del 90% y la visibilidad sobre los próximos meses es muy limitada, pero los mejores datos sobre la crisis sanitaria, los esfuerzos de la compañía angloespañola para alargar la liquidez y las ayudas gubernamentales para hacer frente a los costes fijos se están reflejando en el mercado. Su liderazgo en el sector es incuestionable y si sufriera otro ataque bajista, el precio para promediar en esta estrategia de elMonitor, clara recomendación de compra, está en 1,55 euros.
SS&C Tech: 25 dólares
Cae alrededor de un 25% en bolsa en 2020, pese a protagonizar un fuerte rebote desde los mínimos de la corrección, pero los analistas apenas le han recortado un 4% la estimación de beneficio operativo para el conjunto del ejercicio y mantienen sobre sus acciones la recomendación de compra, una de las más claras del sector.
Es una de las empresas pioneras en proveer software y servicios digitales a firmas financieras y su mayor área de crecimiento está en la digitalización de fondos de inversión y de pensiones. Si se produjera una segunda oleada bajista en las bolsas por el impacto de la pandemia de coronavirus en la actividad económica global, elMonitor fija un precio de recompra en los 25 dólares, con la idea de promediar y matizar las pérdidas de la estrategia que se abrió en ella el 3 de junio de 2019, a 54 dólares.
Airbus: 40 euros
Cotiza en mínimos de 2016, a causa del impacto directo de la hibernación económica para contener la crisis sanitaria del coronavirus en la industria de los viajes. La cancelación de contratos amenaza a la compañía, pero su fortaleza sigue residiendo en el duopolio que forma con Boeing. El consenso de analistas que ha recortado un 30% la previsión de beneficio operativo de cara al cierre de 2020, hasta los 5.500 millones de euros, pero para 2021 ya esperan que eleve las ganancias hasta los 6.400 millones. El precio para promediar que fija elMonitor para la estrategia que mantiene sobre sus títulos desde el 23 de octubre de 2019, cuando la herramienta compró sus acciones a 120 euros, se sitúa en 40 euros.
Atos: 39,60 euros
Atos, por su parte, no está siendo ajeno a la crisis que ha supuesto para el planeta la rápida propagación del coronavirus. Sin embargo, en una firma dedicada a los servicios digitales, que incluye la soluciones de ciberseguridad, centros de datos y desarrollo de software la implantación del teletrabajo no ha sido, ni mucho menos, un drama como sí ha podido suponer para otras firmas menos acostumbradas a estas lides: el 95% de su plantilla está trabajando desde sus casas. "El modelo de negocio defensivo de la empresa hará que esto sea menos traumático que para muchos compañeros de sector, lo que hace que sus acciones sean atractivas en el entorno actual", aseguran en Deutsche Bank.
Alphabet: 980 dólares
El caso de Alphabet es uno de los más llamativos. La estrategia abierta en la compañía se deja un 25% desde que se volvió a confiar en ella una vez más (las otras veces que se incluyó en cartera a la firma americana dejó ganancias). Pese a ello, los analistas la siguen viendo como una de las firmas en la que más se puede confiar. Así lo aseguran desde JP Morgan, firma desde donde a pesar de advertir de la posibilidad de una reducción de sus ganancias en 2020 provocado por unos ingresos publicitarios en declive, también son conscientes de que la compañía no tiene todos los huevos en la misma cesta: "No estamos reduciendo nuestras estimaciones de beneficio sobre ls áreas de la compañía que no está relacionadas con la publicidad, como su negocio en la nube o Youtube. [...] Vislumbramos una fuerte recuperación en 2021".
Deutsche Post: 19,7 euros
Desde JP Morgan, aseguran que la inversión de Deutsche Post es en estos momentos atractiva "teniendo en cuenta el desajuste que se ha producido entre el precio de sus acciones y el impacto real en el comercio del COVID-19". Y es que, desde la firma estadounidense son conscientes de que "el comercio transfronterizo entre empresas y consumidores acabará siendo un motor clave del crecimiento del grupo a lo largo del tiempo", algo que se ha puesto de manifiesto -más si cabe- durante las últimas semanas de confinamiento. Así lo ven también los analistas de Deutsche Bank que consideran "increíble" que esté cotizando a precios de su salida a bolsa. Por eso, los analistas han reducido sólo "modestamente" sus pronósticos para 2021 y 2022.
Banco Santander: 1,55 euros
Pese al complicado contexto al que se enfrentan las entidades financieras ante la incertidumbre económica y la ultraexpansión monetaria de los bancos centrales, la española sigue manteniendo -de manera pírrica- el consejo de compra y es una de las firmas mejor valoradas para los analistas en el sector en Europa. Y cómo muchas de las empresas del Ibex, a determinados precios en muchas de ellas se puede encontrar una oportunidad de recompra que permita mitigar las pérdidas acumuladas o una vía de entrada a un valor históricamente barato.