
El preacuerdo de gobierno firmado ayer entre Pablo Iglesias y Pedro Sánchez no ha complacido a los inversores y analistas que fijan sus miradas en el Ibex 35. El selectivo español fue el único que cerró la sesión ayer por debajo del nivel al que había iniciado la jornada, dando así un paso más en dirección a sus soportes en vez de a las resistencias a las que se enfrenta en primera instancia, como hicieron el resto de selectivos de Europa.
De hecho, el EuroStoxx 50 logró ayer la superación de la zona de resistencia que representan los máximos que alcanzó en 2017 en los 3.710 puntos en una clara señal de fortaleza que le sitúa en disposición de poder alcanzar los altos de 2015, que están a un 3% de distancia de los niveles de cierre de ayer.
Pero en el Ibex, en cambio, la situación es muy diferente. "Mientras no se pierda el soporte de los 9.200 puntos se mantendrán intactas las posibilidades de acabar viendo más alzas", señala Joan Cabrero, director de estrategia de Ecotrader, quien advierte de que la pérdida de dicha cota abriría la puerta a un contexto correctivo bajista en el selectivo español hacia los mínimos de octubre, en la zona de los 8.850 puntos".
Esto no hace más que ahondar en la herida que ya se había abierto en España en los últimos tiempos y, de hecho, el gap con el Viejo Continente ya se acerca a los 15 puntos porcentuales -el Ibex suma un 9,3% en el año mientras que el EuroStoxx ya rebota más de un 23%-.
"La caída de la bolsa española refleja los temores del mercado al preacuerdo de coalición PSOE-Unidas Podemos, sobre todo por el discurso político en materia fiscal", apunta Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank. "La noticia echa por tierra las esperanzas de ver un entendimiento entre PSOE y PP, que era la opción preferida por el empresariado", añade el experto.
Dudas al otro lado del Atlántico
A todo ello hay que sumar las últimas dudas que ha instaurado en el mercado el discurso en el club económico de Nueva York del presidente de EEUU, Donald Trump. Si hay algo sobre lo que el mercado puso el foco de sus palabras fue en la falta de detalles sobre la firma del acuerdo arancelario entre EEUU y China, lo que ha sido interpretado como un estancamiento de la situación comercial entre ambos países
La falta de referencias a los pormenores del acuerdo entre ambas naciones ha introducido algo de incertidumbre en las bolsas de Norteamérica y Asia que se ven afectadas además, por el recrudecimiento de nuevo de los disturbios en las calles de Hong Kong, donde el Gobierno ha anunciado la suspensión de la jornada lectiva del jueves.
Todo ello se ha visto reflejado en unos mercados a la baja en Japón y China que se adhieren al tono rojo que reflejan los futuros de Wall Street en las últimas horas tras conseguir ayer algunos de sus selectivos como el S&P 500 y el Nasdaq 100 marcar un nuevo máximo relativo creciente en la subida y un nuevo alto de todos los tiempos.
"Una cierta debilidad en la presión compradora que plantee la posibilidad de ver a corto plazo una consolidación o corrección de parte de los últimos ascensos, la veríamos del todo normal y una oportunidad para comprar renta variable norteamericana", asegura Cabrero, quien sin embargo, no ve aún esta tendencia.