
El sorpasso, pese a que se veía venir desde hace semanas, se ha adelantado contra todo pronóstico y en los últimos compases de una sesión en la que se diluyeron casi 1.500 millones de gap. Como si fuera la última curva de una carrera de velocidad, Iberdrola superó en valor en bolsa a Santander en un adelantamiento que no se había dado antes en la historia de ambas cotizadas y con el que ya se cuelga la plata del indicador español. Así, mientras que Iberdrola cerró la sesión con una capitalización de 57.832 millones de euros, Santander concluyó con un valor de 57.648 millones.
El fuerte castigo que está recibiendo el sector bancario frente al refugio que han buscado los inversores en las utilities ha sido el turbo de uno y el freno del otro en los últimos meses. El cierre de esta brecha ha sido contínuo desde comienzos del año pasado, cuando la misma se situaba por encima de los 55.000 millones de euros. En ese momento, Santander rondaba el valor de los 100.000 millones mientras que la eléctrica valía algo menos de 43.000.
Las alarmas de desaceleración económica en Europa han provocado un nuevo proceso de políticas monetarias expansivas que, si bien todavía no han cristalizado, se espera que lo hagan en las próximas reuniones del Banco Central Europeo, alejándose más si cabe la esperada (por los bancos) subida de tipos, lo que está penalizando a esta industria en los últimos meses.
"Esto hace que los inversores busquen sectores más defensivos y huyan de los más problemáticos", apunta Óscar Anaya, analista de la gestora Tradition. "Las políticas expansivas seguirán dañando las cuentas de resultados del sector bancario", añade el experto.
En este sentido, a Íñigo Isardo, de Link Securities, no le extraña que Iberdrola supere a Santander dado que "el negocio bancario propiamente dicho [márgenes de intereses y comisiones netas] no tiene apenas crecimiento, lo que unido a los fuertes requerimientos de capital por parte del BCE obliga a las mismas a rentabilizar su negocio mediante la reducción de costes y la desinversión en activos no estratégicos".
Naturaleza defensiva
El caso contrario es el de las utilities, cuya naturaleza defensiva las ha hecho ganadoras en este escenario de incertidumbre. Además, "los menores costes de su deuda les permitirá seguir conservando sin sobresaltos su estructura de apañancamiento y, sobre todo, su política de dividendos", explica Anaya.
"Es un sector más descorrelacionado con respecto a estos acontecimientos, lo que le permite seguir aumentando su capitalización ante tales situaciones de desaceleración", arguye Eduardo Asenjo, de Investing.com. Además, Felipe López-Gálvez, analista de Self Bank, recuerda que "el menor rendimiento de la renta fija está llevando a muchos inversores a apostar por este tipo de valores, con sesgo defensivo y alto dividendo".
Iberdrola se anota más de un 26% en lo que va de año y ha llegado a tocar máximos no vistos desde 2008. Sin embargo, la recomendación que recibe por parte del consenso de analistas se ha deteriorado ligeramente en las últimas semanas y la proporción de consejos de compra ha caído por debajo del 50%. Asimismo, los expertos no le conceden recorrido alguno a sus acciones de cara a los próximos 12 meses.
La firma que más pesa en el Ibex 35
Además de superar a Santander por capitalización, Iberdrola está cerca de batirla en cuanto a la ponderación dentro del Ibex 35 ya que pondera casi un 12,4%, 40 puntos básicos menos que la entidad bancaria. De superar este nivel, se convertiría en la compañía que más pesa dentro del selectivo de referencia nacional ya que Inditex, que sigue siendo la que más capitaliza del índice, sólo pondera algo más de un 10% debido a su menor free-float.