Industria

Los despidos masivos en las 'tech' se extienden a motor, industria o 'farma'

  • La única empresa del Ibex que acomete un ajuste es Grifols, con la salida de 2.300 personas
  • Solo el sector tecnológico ha eliminado 106.000 este año, con la destrucción 2.200 puestos diarios

El terremoto de despidos que barrió a la gran mayoría de las grandes tecnológicas ha tenido réplicas que comienza a sentirse en cada vez más sectores. En lo que va de año, centenares de miles de personas han perdido su empleo por la necesidad de las compañías de encontrar la rentabilidad en sus actividades tras la sucesión de crisis como el Covid, los suministros o el encarecimiento de la energía tras la guerra entre Rusia y Ucrania. La industria tecnológica ha acaparado gran parte de los recortes laborales en todo el mundo, con casi 106.000 puestos suprimidos en apenas mes y medio. De hecho, un total de 365 empresas digitales han reducido sus plantillas, con un ritmo de 2.200 bajas diarias desde el pasado 1 de enero. Ni por asomo se había producido antes una sangría laboral comparable, sin que existan visos de contención.

La aristocracia del Nasdaq, excepto Apple, ha anunciado ajustes de plantilla históricos en las últimas semanas, en una espiral de destrucción de empleo que coincide con un momento especialmente alcista de la digitalización de los hogares y empresas. Al mismo tiempo que medianas y grandes corporaciones confirman sus inversiones en servicios en la nube, inteligencia artificial y ciberseguridad, muchas de las empresas que prestan estas actividades reducen sus recursos humanos. No obstante, según explican a elEconomista.es fuentes del mercado, la mayor parte de los tijeretazos se producen en departamentos comerciales y administrativos, en muchos casos sobredimensionados durante los felices años de vacas gordas. También los departamentos de reclutamiento de personal sufren el azote del desempleo, una vez que la estrategia de las compañías han cerrado parcialmente el grifo a las nuevas adquisiciones.

La onda expansiva de las tech ha contagiado a sectores tan diferentes como el motor o las farmacéuticas, donde la pandemia de despidos ha llegado a afectar al máximo exponente de este sector en el Ibex.

Grifols es el caso más reciente, pero seguramente no será el último. La compañía catalana anunció el miércoles un recorte del 8,5% de su plantilla. Serán 2.300 personas las que perderán su empleo, la gran mayoría de ellas en Estados Unidos. En España saldrán unas cien personas. Grifols tiene la necesidad de reducir la deuda que se desbocó tras el Covid, para lo cual ha elaborado un plan de ahorro de 400 millones anuales en el que se han incluido los despidos mencionados que se anunciaron hace apenas unas horas.

Antes de la maniobra de Grifols, otra farmacéutica recortó su plantilla dentro de un plan de reestructuración del negocio. Fue Novartis la que estimó 8.000 despidos, de los que, en un principio, 220 afectarían a España, un 10% de la plantilla. Tras la negociación con los sindicatos, la cifra se redujo hasta las 117 personas, un 5,5% del total.

Philips, especializada desde hace unos años en el sector salud, también ha anunciado 10.000 despidos en los últimos meses. Todo empezó en octubre, cuando la compañía neerlandesa puso sobre la mesa un recorte de 4.000 personas. Tras la presentación de resultados a principios de este año, la cifra se aumentó en otros 6.000 trabajadores.

En la industria automovilística, Ford ha sido la que ha llevado a cabo un recorte más voluminoso. En total, la firma del óvalo recortará 3.800 puestos de trabajo. De ellos, 2.800 empleos corresponden a ingenieros y 1.000 a administrativos. No obstante, la mayoría de estos despidos se producirán en Alemania (2.300) y Reino Unido (1.300). En el caso español, afectará a algunos cargos administrativos, aunque la empresa no ha querido concretar el número previsto, según ha podido saber elEconomista.es. El principal problema de la firma norteamericana radica en la pérdida de cuota de mercado, así como en una reestructuración previa a la electrificación de la marca.

Rivian anunció previamente un recorte de plantilla del 6%, es decir, 840 empleados. Todo ello con el objetivo de reducir costes, ya que se enfrenta a la caída de las reservas de efectivo, al tiempo que quiere enfocar los recursos en incrementar la producción para alcanzar la rentabilidad.

Asimismo, Carvana hizo lo propio en noviembre, con un recorte del 8% de su fuerza laboral, unas 1.500 personas, debido a la caída de la demanda de vehículos de ocasión por los altos precios y la escasez de suministro. La española Wallbox también llevará a cabo un recorte del 15% de la plantilla. Esto afectará a 156 trabajadores, de los que 145 impactarán sobre su sociedad matriz.

Otros de los sectores más afectados es el industrial. 3M despedirá a 2.500 empleados, cerca del 3% de su plantilla. Se trata de su mayor recorte en la última década. "Reduciremos aproximadamente 2.500 puestos de fabricación globales, una decisión necesaria para alinearnos con los volúmenes de producción ajustados", explicó Mike Roman, CEO de la compañía. Por su parte, la química Dow va a ejecutar un ERE que afectará a 2.000 empleados, que representan al 5% del total. Al igual que la mayoría de las compañías, justifica estos despidos por la necesidad de ahorrar costes. En España, los trabajadores de Arcelor están afectados por un ERTE desde hace meses y todo apunta a que la situación se extenderá en 2023. Además, la acerera estudia eliminar 120 puestos de trabajo en Asturias.

La burbuja parece haber explotado hasta en el sector del streaming, que durante los primeros años de la pandemia creció a niveles nunca vistos. Disney ha anunciado el despido de 7.000 empleados, cerca del 3% de su plantilla. Su servicio de vídeo bajo demanda perdió 1.100 millones en su primer trimestre fiscal y se dejó 2,4 millones de suscriptores.

Banca y Seguros

En la banca, las entidades han casi completado los ajustes derivados de las fusiones de CaixaBank con Bankia y Unicaja con Liberbank, y comienzan a verse aumentos de plantillas en España después de que las integraciones y cierres de sucursales hayan reducido su personal en más de un 25% de puestos vía prejubilaciones y despidos en la última década. El Santander aumentó, de hecho, un 0,62% su plantilla en España en 2022, hasta los 26.839 empleados; y BBVA en un 4,4%, hasta 25.945. En el conjunto de bancos cotizados (incluido CaixaBank, Bankinter y Unicaja) la cifra global cayó, sin embargo, en un 4,66% la plantilla o 5.800 empleados, hasta situarla en 20.850 y, aunque descartan nuevos ERE, podrían darse ajustes en personal y oficinas a medida que más clientes prefieren trabajar por canal digital.

Sin embargo, en el sector asegurador continúan los redimensionamientos de red de los últimos años por planes de eficiencia o adaptación al escenario más digital. Catalana Occidente prevé hasta 550 salidas tras fusionar sus filiales de seguro tradicional y AXA ha citado a los sindicatos para negociar un ERE, aún sin cifrar. Son ajustes que coinciden con la comprensión de márgenes en el sector por la guerra de precios del pasado y mayores costes por la inflación.

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Comentarios 1

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JuanSinMiedo
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En Contra

Con lo que el "Mantra" aplicado exclusivamente al sector Tecnológico, se cae por si mismo.

Que las Empresas Tecnológicas despidan ahora, solo pone de manifiesto, que habían creado muchos puestos de trabajo antes, y volverán a crearlo, y las mal llamadas "Value", al final toman la misma decisión, pero eso si, de manera mas lenta, con lo que el sector Tecnológico, hace palpable una vez mas su dinamismo, del cual carecen las Empresas Tradicionales.

Pero uno escucha por los medios, a toda clase de "analistos" aseverando que las Tecnológicas lo hacen porque están fatal, por la subida de tipos, como si solo este sector empresarial fuese el que acude a financiarse, y no lo hiciesen las demás.

Al día siguiente, lee uno que Microsoft, compra la Bolsa Londinense, o que la mayoría recompra sus propias acciones, y pienso.... Pues no estarán tal mal.

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#1