Empresas y finanzas

CaixaBank va más allá de la reforma y asume el gasto de tasación del piso

  • Modifica sus hipotecas tras elevar tipos y retirar la comisión de apertura
Foto: Archivo.

CaixaBank ha ido más allá de la reforma hipotecaria en la revisión de las condiciones de su oferta tras el decreto del Gobierno, que exige el pago a las entidades del Impuesto de Actos Jurídicos Documentados (AJD).

El lunes por la tarde el banco de origen catalán modificó algunos de los criterios de sus créditos para la adquisición de una vivienda después de que fuera uno de los pocos grupos financieros en anticiparse al cambio de normativa con una subida de los tipos de interés. En esta ocasión volvía a adelantarse a los posibles ajustes de la legislación, cuyos términos están en debate aún en el Congreso.

La entidad dirigida por Gonzalo Gortázar, a partir de ahora, afrontará todos los costes derivados de la constitución de un hipoteca, es decir, notaría, gestoría y registro, además de la tasación. Con este movimiento mejoraría el reparto pactado el martes por la mayor parte de los diputados, por el que éste último coste continuará siendo asumido por los clientes por un importe que oscila entre los 250 y 500 euros.

Margen de maniobra

El alza de los tipos, de 0,4 puntos porcentuales hasta un mínimo del 2,75%s en sus créditos a tasas fijas, ha permitido a CaixaBank tomar esta decisión sin poner en riesgo la rentabilidad que logra por estos productos. Encareció los intereses en pleno periodo de incertidumbre sobre el AJD, aunque entonces eliminó también la comisión de apertura del 1%.

CaixaBank, desde hace tiempo, solo promociona las hipotecas fijas al considerar que las variables pueden suponer un peligro para los clientes y para el sector financiero si el euríbor avanza más de lo previsto. De hecho, ha reclamado en más una ocasión la ayuda a los políticos para poner coto a este tipo de préstamos por cuestiones de responsabilidad social.

Hasta ahora asumía parte de los costes de constitución, como buena parte del sector como consecuencia de la avalancha de reclamaciones por parte de los usuarios. Desde ahora son todos, a excepción de aquellos que obedecen a la compra venta del inmueble o el impuesto de transmisiones patrimoniales.

La entidad ha sido la única que ha ajustado su oferta a los cambios legales ya materializados y a los que están por venir. Otras se han adaptado a medias, como Ibercaja, que se anticipó a una posible carga del AJD con un incremento de los tipos tanto en la variable como en las fijas, de 0,15 puntos porcentuales. Sabadell y Santander, en cambio, han decidido retirar sus promociones gancho y, por el momento, negociarán con cada cliente las condiciones de los créditos. Bankia, por su parte, se ha decantado por mantener los criterios como hasta la fecha, mientras que el resto analiza la situación y la competencia.

Los bancos prevén un encarecimiento de las hipotecas después de todos las modificaciones normativas, ya que sus costes de producción se han incrementado sustancialmente. Es más se lo han advertido al Gobierno y a las autoridades de manera reiterada, a pesar de éstos han insistido en que estarán vigilantes para que no haya un pacto sectorial con el fin de repercutir estos gastos a los consumidores.

WhatsAppFacebookFacebookTwitterTwitterLinkedinLinkedinBeloudBeloudBluesky