Las entidades han incrementado el interés medio al que comercializan los nuevos préstamos, después de tocar mínimos entre finales de año e inicios de 2021 por la baja demanda que dejó la crisis. Sin embargo, los bancos comenzaron a ver una recuperación de la producción durante el mes de marzo, tal y como destacaron varias entidades en la presentación de resultados del primer trimestre del año, y con ella, también ha habido una subida en los tipos medios dicho mes, según los datos que recoge el Banco de España. Este alza de los intereses por la mejora de la demanda redirige la mirada a un punto de inflexión en los precios de los créditos, a la espera de confirmar la tendencia en los próximos meses.
Concretamente, en el caso de los créditos a través de las tarjetas revolving, el tipo medio al que se comercializan subió del 17,85% de febrero (nivel más bajo de los últimos años) al 17,91% en marzo. Asimismo, en los préstamos al consumo, ascendió del 6,94% hasta el 7%. Y, finalmente, en el caso de las hipotecas, el incremento fue del 1,69% al 1,73%.
Las entidades esperan que la buena evolución de las hipotecas, que cogió velocidad en enero y marzo, continúe a lo largo del año. Del mismo modo, el crédito al consumo, uno de los más afectados por las restricciones de la movilidad por la pandemia, también reflejó signos de mejora en marzo y las entidades confían en que su recuperación llegará entre este segundo y el tercer trimestre del año. Un incremento de la demanda también conllevaría a un alza del interés al que se comercializan.
De hecho, varias entidades, entre ellas Santander, BBVA, Bankinter o ING, han tumbado el interés de los préstamos al consumo preconcedidos (aquellos que se ofertan directamente a los ya clientes de la entidad porque conocen su solvencia y riesgo al tener sus datos) durante la crisis sanitaria hasta el 4%, bajo el intento de reflotar la demanda. Unos niveles históricamente bajos para este segmento de préstamos que precisamente por tener los mayores tipos son los más rentables para el sector frente a las hipotecas, en mínimos, tras cinco años con el euribor en negativo.
El conjunto de entidades que opera en España concedió a cierre de marzo, último mes del que hay datos, 2.523 millones de euros en crédito al consumo. Esta cifra ya refleja una mejora del 18% frente a febrero y del 40% frente a enero. Sin embargo, aún se mantiene lejos de la nueva producción de estos préstamos que se hacía antes del inicio de la crisis sanitaria. La banca dio en febrero de 2020, mes previo a que estallara la pandemia, 3.137 millones. Por tanto, la producción del pasado marzo aún está un 20% por debajo del periodo pre-Covid.

Similar situación se refleja en el crédito a través de las tarjetas y de la modalidad revolving, que no se ha recuperado de la crisis. De hecho, cerró marzo con 10.068 millones de financiación, casi un 12% inferior a la de febrero de 2020. El caso contrario llegó del lado de las hipotecas, que ya en el tercer trimestre del año pasado comenzaron a reflejar una mejora. A pesar de que la producción se hundió a la mitad en abril del año pasado, en pleno confinamiento, cerró el ejercicio con un leve incremento del 0,9% frente a 2019.
Asimismo, ha arrancado el año con uno de los mejores niveles de la historia. La banca concedió 4.462 millones de financiación para préstamos inmobiliario en febrero, marcando el mejor febrero en once años. Y en marzo prestó 5.729 millones de euros, cifra que alcanzó el récord de la última década. La última vez que se superó esta cuantía fue en diciembre de 2010, cuando entonces las entidades prestaron un nivel muy superior, de 9.712 millones de euros.
El mayor ahorro de las familias menos afectadas económicamente por la crisis ante las restricciones de la movilidad, junto con unos tipos hipotecarios históricamente bajos han alentado la compra de vivienda.
Apertura económica
Los distintos expertos ya avanzan que Europa va a tomar el testigo este verano en crecimiento del consumo a EEUU por la vacunación y la apertura económica. La demanda del consumo de país norteamericano tocará techo en este trimestre, puesto que las tasas de inflación más altas reflejan que los precios vuelven a los niveles anteriores a la epidemia y las dificultades para satisfacer el fuerte aumento de la demanda de ciertos suministros y bienes han obligado a fabricantes y compañías a subir sus precios, según argumentó el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell.