
Siemens Gamesa Renewable Energy (SGRE) facturó 2.300 millones de euros durante su primer trimestre fiscal de 2021, con un margen bruto del 5,3% lo que se traduce en 121 millones, frente a pérdidas de 136 millones en el mismo período de 2020. La compañía confirma sus expectativas para el conjunto del ejercicio.
Así se recoge en la información remitida a la CNMV el domingo por la noche, donde da cuenta de sus resultados preliminares, después de que su matriz, Siemens Energy, publicara sus propios resultados preliminares.
SGRE ha reducido a la mitad su cartera de pedidos, hasta los 2.300 millones, frente a los 4.600 millones en el mismo trimestre del ejercicio 2020. La cifra refleja, a su juicio, la volátil naturaleza del mercado eólico terrestre, y una fuerte contribución en pedidos de aerogeneradores y servicios en el primer trimestre del ejercicio 2020.
Durante el primer trimestre no se han registrado pedidos de aerogeneradores marinos -offshore en inglés- ni de servicios relacionados con ellos, si bien se esperan para los próximos meses.
Los ingresos del grupo ascienden a 2.300 millones, hasta 15% interanual, favorecido por crecimiento fuerte en offshore e impactado negativamente por la devaluación de divisas.
El Ebit pre-PPA y antes de costes de integración y reestructuración asciende a 121 millones, frente a pérdidas de -136 millones en el primer trimestre del ejercicio 2020, lo que equivale a un margen de 5,3% sobre ventas, beneficiándose de impactos positivos puntuales en dicho trimestre.
Como resultado de dicho desempeño preliminar, la Sociedad confirma y mantiene sus previsiones para el ejercicio 2021 tal y como se anunciaron el 5 de noviembre de 2020.
Guías hasta 2023
Durante los dos primeros años del plan de negocio, la empresa dirigida por Andreas Nauen espera una ratio de inversión sobre ventas entorno a un 6%, un rango de ventas de 10.200 a 11.200 millones y un crecimiento por encima del crecimiento de mercado hasta 2023.
El margen EBIT pre PPA y antes de costes de integración y reestructuración se debería situar entre un 3% y un 5% en este 2021, obteniendo una rentabilidad normalizada del 8% al 10% en 2023.
Los costes de integración y reestructuración previstos alcanzan los 500 millones durante todo el período, y deberían ser de unos 300 millones este 2021.