La tormenta perfecta en Reino Unido justo antes de Navidad amenaza a las exportaciones españolas a la isla, que alcanzan los 66,6 millones diarios y mueven hasta 1.200 camiones (con las importaciones, el comercio entre los países suma los 100 millones al día). La nueva cepa del virus del Covid-19 detectada en el sur de Inglaterra se ha sumado al inminente Brexit sin acuerdo, terminando de colapsar la frontera con Francia, donde los camiones llevan días agolpándose creando kilómetros y kilómetros de colas. Leer también: Pesadilla antes de Navidad: la cepa británica amenaza el rally
Así, al colapso en el tránsito de mercancías entre Dover y Calias registrado desde mediados de diciembre por el Brexit, se suma la decisión del presidente francés, Emamnuel Macron, de cerrar el Canal de Mancha durante 48 horas a todo tipo de tráfico (sólo pueden pasar vacunas y medicinas) ante la falta de información sobre la mutación del coronavirus que ha llevado a Boris Johnson a confinar el sur de la isla y a Holanda, donde también se viven problemas en los puertos, a prohibir los vuelos con el país, entre otros gobiernos.
Los camiones llevan días agolpándose en la frontera y el cierre del Canal da la puntilla a las colas
Francia tomó la decisión anoche y hoy se ha reunido la Unión Europea de urgencia para estudiar la conveniencia de la medida aunque nada parece indicar que se vaya a levantar el veto antes de las 48 horas dictadas. Así, los camiones pueden llegar a Reino Unido en ferri por el canal, pero no pueden volver al Continente porque la frontera está cerrada. En este punto, el Eurotunnel (tren) ha suspendido sus servicios ya que tampoco podría volver, lo que reduce mucho la capacidad ya que los camiones se suben en esos trenes.
Fuentes de la patronal del transporte internacional por carretera, Astic, señalan que el cierre ha dejado tirados a más de 800 camiones españoles en la frontera y que se están paralizando las exportaciones ante la incertidumbre, lo que afectará de lleno a la economía española puesto que Reino Unido es el cuarto destino de las exportaciones españolas por carretera con 3.000 millones de euros al mes de mercancías en ambas direcciones, al mismo nivel que Italia, y estamos en el pico de la campaña de los cítricos. Las exportaciones españolas a Reino Unido entre enero y julio han alcanzado los 9.395 millones, una cifra inferior a 2019 por el covid-19. Las importaciones en ese periodo suman los 5.219 millones.
En este punto, estas mismas fuentes señalan que algunos camiones con productos perecederos están yendo a Inglaterra en los pocos ferris que hay pese a las dudas sobre cuando podrán volver. "Además de suponer un problema económico, es un drama humano ya que hay muchos conductores atrapados sin acceso a comida o bebida. Reclamamos que vaya atención civil", señala Ramón Valdivia, secretario general Astic, a este diario.
La inminente imposición de aranceles dispara la demanda de mercancías en un momento con poca capacidad
Como ya se ha apuntado, el cierre temporal del Canal de la Mancha es la puntilla al colapso el tránsito de mercancías que lleva días registrándose entre Francia y Reino Unido, que es el punto de paso del grueso de las exportaciones que van a las islas desde el resto de Europa y viceversa. Ante la inminencia del Brexit sin acuerdo, la demanda de bienes ha crecido en Reino Unido y, según cálculos de Astic, el flujo de mercancías es un 40% superior a lo que se debería en esta época del año. Además, el desplome del tráfico de pasajeros entre la isla y Francia por el coronavirus ha hundido la oferta de ferris por lo que hay menos capacidad en el mercado para trasladar los productos, lo que ha generado kilómetros y kilómetros de colas y más de siete horas de esperas para pasar la frontera.
"Además de suponer un problema económico, es un drama humano ya que hay muchos conductores atrapados sin acceso a comida o bebida"
El aumento de la demanda responde a que a partir del uno de enero los bienes de importación van a ser gravados con aranceles y los empresarios que pueden tratan de hacer acopio a precios más bajos. Otro problema que todavía está sin resolverse es la validez de la licencia comunitaria para que los camiones de la UE circulen por Reino Unido y viceversa. Tal y como están las cosas ahora mismo, las licencias decaen el uno de enero y, por ejemplo, los camiones españoles no podrían ir a Londres ni los galeses a París. El Consejo Europeo ya ha aprobado un reglamento de urgencia para prorrogar seis meses la validez de las licencias pero está sujeto al respaldo del Parlamento Europa y a la reciprocidad por parte del gobierno de Boris Johnson. Todavía no se sabe nada.
Problemas en los Países Bajos
Así, aunque se reabra el Canal de La Macha, el tráfico de mercancías seguirá sufriendo bloqueos y colapsos en la frontera por el covid-19 y el brexit. De momento, Reino Unido sigue siendo suministrada por buque con las mercancías que van en contenedores o el remolques sin conductor.
El colapso en la tráfico de mercancías hacia Reino Unido por el Brexit también se está viviendo en Holanda, donde se mantiene abierto el tránsito de bienes aunque se han prohibidos los vuelos de pasajeros. En este punto, desde los Países Bajos advierten que no son una alternativa de paso (vuelta) viable puesto que la logística se está complicando mucho y no está claro cuánto tardarán en regresar al continente los camiones. Así, alertan de que los ferris están llenos hasta enero y que los conductores "se enfrentarán a importantes atascos de tráficos que no les permitirá llegar al puerto". "Si un conductor está al tanto de la situación y aún desea ir a Reino Unido, se recomienda encarecidamente no hacerlo sin una confirmación de reserva", informa la asociación de Transporte y Logística de Países Bajos, TLN.
Bélgica sería otra alternativa para que los camiones volviera de Reino Unido en pleno bloqueo pero el tránsito está muy restringido por los PCR que se exige a cualquier persona que entre en el país.