La normativa impulsada por el Ministerio de Trabajo para garantizar la "laboralidad" de los riders ha dividido a las plataformas de comida a domicilio y a los casi 15.000 repartidores que trabajan para ellas entre los defensores de seguir con el modelo de autónomos, calificados como "falsos" por una parte de los tribunales, y los que buscan que se fije por ley un "marco laboral estable y seguro" que despeje cualquier duda sobre su condición de trabajadores por cuenta ajena.
En el primer equipo se encuentran Deliveroo, Glovo, Stuart, Adigital y las asociaciones de autónomos AAR, APRA y Asoriders que, según sus cifras, representan a unos 1.400 repartidores. En el segundo está el sindicato ridersxderechos y Just Eat, la plataforma líder nacional de comida a domicilio que este año cumple una década en nuestro país.
Así, la compañía se ha enfrentado a la postura defendida por sus principales competidores y su manera de operar y ha respaldado la propuesta del Ejecutivo de legislar para acabar con los falsos autónomos. "Apoyamos la decisión del Gobierno de regular la actividad por dos razones. Primero, el sector tiene que encuadrarse dentro de un marco legal que garantice una seguridad jurídica para que todos operemos bajo las mismas obligaciones y no se generen desventajas competitivas. Y, segundo, porque la falta de claridad jurídica está redundando en una precariedad laboral entre los repartidores que impacta negativamente en el conjunto del sector que lideramos", explica Patrik Bergareche, director general de firma en España.
Unas declaraciones que vienen a subrayar lo trasladado al Ministerio de Trabajo durante la consulta pública de que señala "la desventaja competitiva entre los distintos operadores" por el uso de falsos autónomos. Es más caro tener trabajadores por cuenta ajena que usar autónomos.
"El sector tiene que encuadrarse dentro de un marco legal para que todos operemos bajo las mismas obligaciones y no se generen desventajas competitivas"
En este punto cabe recordar que todos los repartidores que trabajan con Just Eat tiene contratos laborales ya sea porque son empleados de los restaurantes que operan con la plataforma o porque forman parte de la plantilla de las empresas a las que contratan para repartir de los pedidos. Y es que, hace unos años la compañía nacida en Dinamarca entró en la distribución propia pero descartó utilizar autónomos por la falta de garantías para los repartidores y el vacío legal. Un vacío que pide que se llene inclinando la balanza hacía la laboralidad.
"No es cierto que la precariedad laboral sea intrínseca a la innovación. La regulación pendiente ha de facilitar un entorno de innovación y crecimiento y un entorno de empleo sostenible de calidad", señala Just Eat en el escrito aportado a la consulta pública previa abierta por el Ministerio de Yolanda Díaz para la modificación del Real Decreto 2/2015 de 23 de octubre.
Deliveroo, Glovo y Adigital también han participado en la consulta para defender la necesidad de crear la figura del autónomo digital que les permita evitar tener que contratar a los repartidores ya que eso limitaría su crecimiento.
Adigital ha presentado un escrito en línea con la propuesta regulatoria publicada en 2019 en la que defiende que los repartidores son autónomos y "quieren serlo" ya que la figura es la única que les permite "tener flexibilidad para elegir horarios, vacaciones, trabajar para varias plataformas y combinar la actividad con otros empleos o estudios". Así, la asociación, de la que forman parte Glovo y Deliveroo pide "una reforma de la Ley 20/2007 que califique expresamente a estos usuarios proveedores de servicios como trabajadores autónomos, y que corrobore que su encuadramiento en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos es correcto".
"Queremos una reforma que califique expresamente a estos usuarios proveedores de servicios como trabajadores autónomos"
En esta línea, tanto la asociación como las plataformas señalan que es importante blindar la relación mercantil con los repartidores para acabar con la judicialización y configurar un sistema "flexible y garantista" que permita ofrecer a los riders autónomos "más seguridad y protección social sin poner en riesgo su flexibilidad".
"Como hemos manifestado en nuestras alegaciones ante la consulta pública, confiamos en que la futura regulación aporte estabilidad y certeza y permita que las plataformas operen, en beneficio de los trabajadores independientes y los restaurantes, permitiendo reforzar sus relaciones con los repartidores y ofrecer mayores protecciones manteniendo la flexibilidad que requiere la economía bajo demanda", explica Deliveroo.
Por su parte, Glovo recuerda que la compañía ha defendido desde el comienzo "la idoneidad de una nueva regulación adecuada a la realidad del trabajo en plataformas digitales y el tipo de servicios que ofrecemos en España, en línea con las asociaciones mayoritarias de repartidores". La catalana hace referencia a Asoriders, que también ha participado en la consulta y que en junio envió una carta a la ministra para pedir que el colectivo mantuviera su condición de autónomos aunque cambiando dos cosas: tener vacaciones pagadas y fijar sus tarifas.
¿Francia o California?
Mientras Deliveroo y Glovo aplauden la legislación aprobada por Francia para amparar a los autónomos digitales, Just Eat pide que el Gobierno se fije en California, que parte de la base de todos los trabajadores de plataformas son asalariados, y que vaya un paso más allá para adaptar el Estatuto de los Trabajadores a las nuevas realidades. "Debe avanzarse hacia una nueva regulación que, presuponiendo la laboralidad de los trabajadores de la economía de plataforma, incluya fórmulas que doten de flexibilidad al rígido modelo actual de trabajador por cuenta ajena".
Así, para poder atender los picos de demanda, que en fin de semana puede triplicar a los del lunes, solicita que se puedan incrementar el número de horas complementarias y que aumente el margen para distribuir de manera irregular la jornada de sus trabajadores, que ahora es un 10%.
"Se puede conciliar laboralización con ciertos ámbitos de flexibilidad, que ayuden a responder a los retos de los nuevos modelos y hábitos de consumo. La clave será que los operadores puedan crear empleo adecuando demanda y volumen de horas, respondiendo a los valles y los picos de demanda". Just Eat señala que la volatilidad de la demanda ha llevado a sus competidores a optar por utilizar "falsos autónomos".
