
Villar Mir Energía ha anunciado hoy que la Junta de Andalucía le ha otorgado la concesión de una central hidroeléctrica reversible de 356 MW en la provincia de Granada en la que prevé invertir unos 300 millones de euros. Las obras, que podrían empezar el año que viene, emplearán a 3.400 personas durante unos seis años.
La sociedad del Grupo Villar Mir para los negocios energéticos señala que está realizando los estudios geotécnicos para asegurar la viabilidad y la adecuación de las obras, que afectarán a los municipios granadinos de Benaudella y El Pinar, y en las que se emplearán a unas 900 personas directamente, que a su vez generarán otros 2.500 puestos de trabajo de forma indirecta.
La empresa dirigida por María Luisa Huidobro señala que la concesión de aguas otorgada por la Junta supone que la construcción del proyecto -declarado de Interés Común por parte de la Comisión Europea- podría empezar en 2021, una vez se hayan recibido todas las autorizaciones administrativas.
El Gobierno quiere potenciar las centrales hidroeléctricas reversibles, porque son piezas clave del entramado eléctrico de los próximos años. Básicamente, tienen dos embalses que permiten almacenar energía al bombear el agua del embalse inferior al superior para desembalsarla y generar cuando sea necesario, y, además, contribuyen a mantener la calidad y la continuidad del suministro eléctrico, algo básico cuando hay mucha producción renovable intermitente, como la eólica o la solar.
Por eso el Gobierno quiere instalar 3.500 MW de nuevos bombeos durante la presente década, duplicando su peso en la cesta de generación del país, y ha incluido en la futura Ley de cambio climático y transición energética que los nuevos bombeos operarán prioritariamente para respaldar dicha generación renovable, con unas condiciones que aún se deben establecer.
Falta de visibilidad regulatoria
La falta de visibilidad regulatoria sobre el futuro régimen económico de este tipo de centrales es una de las razones que impide el despegue de estas centrales, aunque hay proyectos de Repsol, en Aguayo (Cantabria), de Iberdrola -proyecta una en el embalse de Alcántara (Cáceres) y construye un gran complejo en Portugal-, de Naturgy, que tiene vía libre para otra de estas centrales en los gallegos ríos Salas y Limia, y de Hunosa, la empresa pública minera, entre otras.
En los últimos años Villar Mir ha puesto en operación los parques eólicos de Valiente (20MW), Tablares (12MW) y Sotillo (15MW) en la provincia de Zaragoza. Asimismo, se encuentra desarrollando un volumen cercano a los 1.000 MW de energías renovables, incluyendo proyectos eólicos, fotovoltaicos y la central hidroeléctrica reversible.
La empresa acabó el año pasado como séptimo suministrador de energía en España, con cerca de 90.000 clientes, unas ventas de 415 millones y un resultado bruto de 12,1 millones.