
La banca se ha comprometido a no vincular la concesión de los préstamos avalados del ICO a ningún otro producto, como puede ser un seguro de pagos. De esta manera, cumplirán los protocolos sellados con el Gobierno y el convenio cerrado con el organismo de crédito público, por los que la financiación ha empezado a disponerse hoy.
Las patronales del sector sostienen que "en relación a la línea de avales incorporada al Real Decreto-ley 6/2020, de 10 de marzo, por el que se adoptan determinadas medidas urgentes en el ámbito económico y para la protección de la salud pública, cuyas condiciones fueron aprobadas mediante Acuerdo del Consejo de Ministros del pasado 24 de marzo, las entidades asociadas a AEB, CECA y Unacc dan instrucciones a su red de oficinas para asegurar una aplicación rigurosa del contenido de dicho acuerdo".
En este sentido, indican que "entre otros aspectos, se ha clarificado que la concesión de un crédito amparado por esta línea de avales no puede estar vinculada en ningún caso a la contratación de otros productos".
El objetivo de esta orden es evitar que los bancos hagan negocio con la línea de liquidez puesta en marcha por el Gobierno para ayudar a las pymes, autónomos y grandes empresas con préstamos garantizados entre un 60 y un 80% por el Estado. El primer tramo de estos avales, por 20.000 millones, ha arrancado en el día de hoy, por lo que estos colectivos comenzarán a contar con el dinero para poder pagar nóminas, impuestos, proveedores y vencimientos de préstamos.
Por cuota de mercado
El convenio rubricado entre las partes fija una distribución de las garantías por cuotas de mercados, tanto en pymes como en grandes empresas. De esta manera, al Santander le corresponden unos 3.600 millones; a CaixaBank, unos 3.000 millones; a BBVA, unos 2.800 millones; al Sabadell, unos 2.100 millones; a Bankia, unos 1.500 millones; y a Bankinter, unos 1.000 millones. El resto del sistema se repartirá 6.000 millones.
Se espera que pronto se agote esta financiación, incluso hoy, debido a la demanda de los últimos días, por lo que la banca ha urgido a la banca a que disponga otro tramo en su plan de avales de hasta 100.000 millones. Sin embargo, el mecanismo ha establecido si a finales de abril alguna entidad no ha cubierto su parte, se distribuirá al resto.
El dinero, aún no así, no estará disponible de manera inmediata en todos los casos. Hoy a las 14:00 horas han cursado las entidades han cursado sus peticiones y los importes de más de 50 millones serán revisados y autorizados por el ICO antes de su concesión.
La línea de avales es una medida tiene como objetivo preservar los niveles de circulante y liquidez de empresas y autónomos y se une, según las patronales, a otras que están llevando a cabo las entidades financieras de manera voluntaria para ayudar a la economía real a hacer frente a las consecuencias de la crisis derivada del COVID-19. Tienen intención de movilizar más de 240.000 millones al margen de las garantías públicas.