
El sector turístico ha reevaluado esta semana el impacto que la crisis del coronavirus tendrá sobre su actividad y apenas encuentra a qué agarrarse. La última encuesta realizada este lunes por Exceltur, organización que agrupa a una treintena de las mayores empresas del turismo de España, arroja ya una caída de las ventas del 87,3%, con descensos en ramas como el ocio que superan el 90%. Un hundimiento que, raíz de la declaración del estado de alarma en España y el confinamiento de los españoles, acentúa la bajada del 46% que la industria turística, con un peso del 12,3% en el PIB, registraba la semana pasada.
Pero lo peor aún está por llegar. Como explica a elEconomista José Luis Zoreda, vicepresidente ejecutivo de Exceltur, "la caída del 87,3% era perfectamente anticipable desde que el sábado se declaró la alarma nacional en España, que se sumaba al cierre previo de discotecas, locales de espectáculos, eventos deportivos, etc.".
Con el confinamiento de los españoles, "nos quedan tres o cuatro días para que las ventas sean cero", alerta. Para realizar estos cálculos, la organización ha encuestado a cerca de 2.400 unidades de negocio turístico, que incluyen, museos, hoteles, cafeterías, agencias de viajes o parques temáticos, entre otras.
El supuesto "más catastrofista" que contempla ahora mismo Exceltur es que no se retomen los ritmos normales de actividad hasta dentro de seis meses
Exceltur ha actualizado el impacto económico para el sector turístico en los tres escenarios que ya contempló la semana pasada y en todos ellos el resultado constata que el golpe será aún mayor. Así, en una hipótesis de que el turismo vuelva a los niveles previos a esta crisis en dos meses, una consideración que Zoreda califica de "absolutamente irreal", las pérdidas, directas e indirectas, serían de 19.500 millones (la estimación del pasado jueves era de 18.825 millones) en 2020.
Para un periodo de cuatro meses, que ya afectaría al verano, el deterioro se dispara hasta los 39.000 millones (frente a los 33.668 millones anteriores). El supuesto "más catastrofista" que contempla ahora mismo Exceltur es que no se retomen los ritmos normales de actividad hasta dentro de seis meses, en cuyo caso, además de la Semana Santa, también se perderá la temporada de verano, y el impacto será de más de 60.000 millones. La previsión para 2020 era que la actividad turística en España generara 158.000 millones.
En términos de empleo, Exceltur apunta a que serán al menos 200.000 los trabajadores que se verán afectados. En otros ámbitos empresariales se duplica e incluso triplica la cifra.
Productos no recuperables
Zoreda hace hincapié en "la enorme vulnerabilidad" del sector del turismo frente a otras industrias, toda vez que "los productos turísticos no son recuperables". Y demanda que en el reparto de los 100.000 millones de avales anunciados por el Gobierno el turismo tenga "una prelación muy especial porque es el más afectado".