
No ha habido sorpresas en la reunión de enero de la Reserva Federal de EEUU. El Comité Federal del Mercado Abierto de la Reserva Federal (FOMC) de EEUU ha decidido por unanimidad mantener los tipos de interés en un rango objetivo del 2,25% al 2,5%. El organismo presidido por Jerome Powell se aferra así a la paciencia, el leitmotiv de la entidad en los últimos meses, después de que el miedo a una desaceleración económica global invite a no restringir aún más la política monetaria en EEUU.
El banco central ha señalado que el mercado de trabajo y la actividad económica continúan mejorando a un ritmo sólido, mientras que la inflación sigue cercana al objetivo del 2%. "A la luz del desarrollo económico y financiero globaly las presiones inflacionarias de la inflación, el Comité será paciente para determinar qué ajustes futuros del rango objetivo de los tipos de interés pueden ser apropiados para respaldar estos resultados", señalan.
El banco central estadounidense subió el precio del dinero por última vez el pasado mes de diciembre, cuando dejó los tipos en máximos desde marzo de 2008 tras acumular cuatro subidas en el pasado año. Aunque entonces la Fed preveía dos subidas en 2019 y otra en 2020, actualmente la mayoría de los analistas auguran que Powell no volverá a subir los tipos en este 2019, y que incluso podría bajarlos en 2020 ante la ralentización del crecimiento económico en todo el mundo.
Sin embargo, hay otras posibilidades para restringir la economía sin subir los tipos. La Reserva Federal podría reducir su balance: un recorte de 400.000 millones de dólares equivaldría a una subida de 50 puntos básicos. Pero Powell señaló el pasado 4 de enero que "escucha las señales de preocupación del mercado", y que no habría problema en alterar la política económica si las condiciones se complican.
En este sentido, tras la reunión de hoy el FOMC ha señalado que "está preparado para usar todo su rango de herramientas (monetarias), incluyendo la alteración del tamaño y composición de su balance, si las condiciones económicas futuras justificaran una política monetaria más acomodaticia de la que se pudiera conseguir únicamente bajando los tipos de interés". Powell ha aclarado posteriormente que no usarían esta medida como "una herramienta activa", pero que se usaría si fuese necesario.
Los selectivos de la bolsa estadounidense han reaccionado con subidas al anuncio, pese a tener descontado el mantenimiento de los tipos de interés. El Dow Jones ha rebasado la barrera psicológica de los 25.000 puntos, que no visitaba desde hace un mes. Los índices venían subiendo durante todo el día, impulsados especialmente por los avances de Apple y Boeing tras la presentación de sus resultados trimestrales.
En la rueda de prensa posterior a la reunión, Powell ha señalado los "signos de conflicto" que aparecen en sus previsiones de la mano de cuestiones como "el Brexit, las negociaciones comerciales o el cierre del gobierno federal en EEUU". En consecuencia, ha señalado que el sentido común recomienda "paciencia" y "esperar a una mayor claridad" de las señales económicas para llevar a cabo cambios en la política monetaria.