
El presidente de la Reserva Federal de Minneapolis, Neel Kashkari, afirma que los tipos de interés se deberían de mantener bajos para apuntalar las perspectivas de inflación a la espera de que los salarios suban. Kashkari se pronunció en contra del último ascenso adoptado el pasado mes de diciembre por el banco central de EEUU.
Son tres subidas de tipos la que se espera para 2018 por parte de la Fed. Pero los díscolos dentro del FOMC están alzando la voz. El presidente de la Reserva Federal de Minneapolis, Neel Kashkari, junto a Charles L. Evans se opusieron a la última subida de tasa de interés.
"La inflación sigue baja, el crecimiento de los salarios es bajo, por lo que abogo por menores tasas de interés para subir los salarios y devolver la inflación a nuestro objetivo del 2%", ha dicho Kashkari en una conferencia en Minnesota. No es la primera vez que el banquero se ha expresado en estos términos, en repetidas ocasiones ha asegurado que prefiere que los precios empiecen a repuntar antes de que se ejecute próximas subidas de tipos.
Kashkari no tiene un voto en el FOMC (el comité de política monetaria que decide sobre los tipos de interés) este año, pero lo hizo en 2017, durante el cual no estuvo de acuerdo con la decisión del banco central de aumentar los costos de endeudamiento tres veces.
En las últimas actas de la Fed de la reunión del pasado 13 de diciembre se recoge una profunda división en el seno del FOMC sobre la posibilidad de alcanzar el 2,1% en los tipos a finales de 2018 mediante otras tres subidas.
"Algunos participantes indicaron que no están cómodos" con las tres subidas propuestas para 2018 porque, "aunque sea gradual", puede ser "inconsistente con el regreso sostenido de la inflación al 2%". "Otros pocos participantes", señala el documento, sí están a favor de endurecer la política monetaria, mientras que "un par de participantes" abogan por "seguir monitorizando y evaluando los efectos de la normalización del balance sobre las tasas de interés a largo plazo y el desempeño económico".