Economía

Espinosa de los Monteros (Vox): "La desgracia es que tenemos el peor Gobierno, en el peor momento posible"

  • Iván Espinosa de los Monteros, portavoz de Vox en el Congreso de los Diputados y vicesecretario de Relaciones Internacionales del partido
Iván Espinosa de los Monteros. Foto: eE

Su confinamiento no es distinto al del resto, pero más ajetreado porque tiene cuatro hijos y se encarga de vigilar sus estudios. Su trabajo también ha aumentado, porque además de acudir a los plenos -cuando hay sesión- mantiene hilo directo a diario con el líder de su partido Santiago Abascal y otros compañeros para marcar la estrategia política.

Aunque su cargo es el de vicesecretario de Relaciones Internacionales de Vox, su condición de portavoz en el Congreso le ha convertido en la voz de su partido y el encargado de lidiar Con los poderes económicos. Cuando a Iván Espinosa de los Monteros (Madrid 1971) -licenciado en Ciencias Económicas y Empresariales (Icade) y máster en The Kellogg Schol of Management- le preguntas si no es la hora de la responsabilidad y no la de pedir responsabilidades al presidente, dice que Sánchez está mintiendo en todo y "Vox no va a ser cómplice de sus mentiras".

Afirma que el gobierno es incapaz de gestionar esta crisis, pide su inmediata dimisión y que se forme un gobierno de emergencia "integrado por personas de prestigio". Tiene un discurso de derechas en estado puro, es educado y exquisito en las formas, pero implacable en el fondo cuando se trata de defender las señas de identidad de su partido.

Vox no ha aprobado el último decreto de alarma del Gobierno. ¿Por qué?

Porque las condiciones que pusimos no se han cumplido y el Gobierno ha ido por el lado contrario. Todo lo que ha hecho el Gobierno de manera constante es un engaño y no nos podemos fiar. No podemos ser cómplices de las actuaciones negligentes y mentirosas de un Gobierno que está manipulando a la opinión pública y gestionando tan mal la crisis sanitaria.

No está tomando las medidas necesarias para la enorme crisis económica que vendrá, y ha profundizado en una enorme crisis institucional con los resortes y contrapesos de la democracia.

"Dijimos que si el Ministerio o el Gobierno nos indicaban que no se debían celebrar actos lo suspenderíamos y el Gobierno nos respondió que 'el machismo mata más que el virus'"

¿A qué se refiere con actuaciones mentirosas y negligentes?

En esta crisis nos han mentido en todo. Cuando tenían información sobre la gravedad de la misma no advirtieron a los ciudadanos, y cada vez que han ido al Parlamento han vuelto a faltar a la verdad. Es falso que se nos haya dotado de los instrumentos sanitarios: mascarillas, guantes, respiradores y trajes de protección individual.

Y nos están mintiendo sobre el número de muertos. Somos el país con más fallecidos por habitantes del mundo comparados con otros de más población como Italia o EE.UU. Este Gobierno miente en todo para ocultar una gestión nefasta y temeraria. Empezó por la gran mentira sobre el 8-M donde ya conocía la gravedad y aun así incitó a todo el mundo a salir a la calle.

Pero ustedes también hicieron su congreso. ¿Eso no fue negligente?

Fue muy distinto. Primero, no somos Gobierno, no tenemos los datos y nuestra información es la que tienen los ciudadanos. Por tanto, la responsabilidad no puede recaer igual sobre una persona que gobierna que sobre los gobernados.

Es más, en Vox sólo con la información que se había publicado los días 5 y 6 de marzo, fuimos lo suficientemente prudentes como para pedir a las personas mayores y a los grupos de riesgo, que no vinieran y que lo vieran por internet.

¿Si hubieran tenido información del Gobierno lo habrían cancelado?

Por supuesto. En esos días dijimos, y ahí está la hemeroteca, que si el Ministerio o el Gobierno nos indicaban que no se debían celebrar actos lo suspenderíamos y el Gobierno nos respondió que "el machismo mata más que el virus". Llevamos pidiendo al Gobierno que tome ciertas medidas desde finales de enero.

¿Qué tipo de medidas?

La primera que pedimos fue que se pusieran controles en las fronteras para tomar la temperatura a la gente que llegaba, cosa que ya hacían en los países avanzados, y además solicitamos poner en cuarentena a los que tenían síntomas.

En febrero pedimos que se cortaran los vuelos procedentes de Wuhan, luego de China, más adelante los procedentes de Italia y que se cerraran las fronteras. A cada cosa que íbamos pidiendo, el Gobierno, que tenía más información que nosotros, nos llamaba xenófobos, racistas y aislacionistas. Luego las medidas que sugerimos las tomaron ellos, pero ya era tarde.

Muchos creen que es momento de la responsabilidad y la unión y luego pedir responsabilidades. ¿No es mejor para los ciudadanos que remen juntos y dar ejemplo?

Naturalmente que tenemos que ir todos a una. Por eso hemos pedido un gobierno de emergencia nacional constituido por personas que no tengan interés político en el futuro, sino una trayectoria demostrada, dilatada y que sean capaces de gestionar la triple crisis: la sanitaria, la económica y la institucional.

Pero necesitamos unidad en el camino correcto, y después de ver lo mal que están gestionado la crisis sanitaria no podemos callar. El Gobierno ha demostrado su incapacidad de gestión y sería irresponsable por nuestra parte engañar a los ciudadanos.

Pues dígame cuál sería la salida...

La salida es que el Gobierno presente su dimisión inmediatamente. Y luego que, entre el PSOE, el PP y Vox -los tres grandes partidos nacionales que representan las tres cuartas partes de la Cámara- acordáramos un gobierno de emergencia, integrado por personas de reconocido prestigio que no tengan interés inmediato en unas elecciones.

¿Y unos pactos de la Moncloa, como ha ofrecido el presidente, no sería una solución que los ciudadanos aceptarían de buen grado?

Primero, hay que saber para qué son esos pactos de la Moncloa. Los originales se produjeron en un contexto de enorme generosidad por parte de todas las partes implicadas. Con este Gobierno eso es imposible porque ni tiene generosidad ni una sola idea buena para sacar a España adelante.

Es muy difícil llegar a unos pactos con un Gobierno que solamente se dedica a hacer oposición a la oposición, como se ha visto en las comparecencias del Congreso. Sólo hay que ver el ataque furibundo que Adriana Lastra le hizo a Pablo Casado en el último debate, y eso que el PP ya había dicho que iba a apoyar al Gobierno. Ahí se vio claro que el PSOE y Podemos pretenden dinamitar cualquier acuerdo de pactos antes de que se inicien.

¿Cree que el Gobierno quiere dinamitar posibles pactos de Estado, se llamen de la Moncloa o no?

Sí, lo creo. Ellos están no por tender puentes, sino por dinamitar cualquier posible acercamiento con la oposición, y lo que hacen es una enorme trampa: te convocan a unos pactos de la Moncloa mientras te atacan para que no puedas acudir y así luego te pueden acusar de no haber buscado la unidad y el consenso.

Vamos, que ustedes ni siquiera van a acudir a la llamada del presidente.

No es posible acudir a unos pactos con alguien que te está insultando. El otro día Alfonso Guerra dijo que, si se compara uno a uno a los líderes de los partidos equivalentes de la Transición a los de ahora, se te cae el alma a los pies. Pero en todo esto, quien tiene la mayor responsabilidad es el PSOE, que ha hecho mucho por degradar las instituciones.

Tampoco la relación entre Iglesias y Sánchez parece buena y, de hecho, Podemos está anunciando medidas sin consensuar con el PSOE...

Creo que esa división de los dos partidos es ficticia. Pedro Sánchez ha decidido podemizarse y muy pronto las bases socialistas acabarán escuchando a sus antiguos líderes, como Felipe González, Alfonso Guerra o Joaquín Leguina, que están en estado de shock por la entrega del viejo PSOE con tantos años de historia a unos jóvenes inexpertos y adanistas.

Muy pronto los grandes socialistas y muchos presidentes autonómicos que están silentes van a pedir cuentas a Pedro Sánchez de por qué se ha entregado a las medidas más radicales. El PSOE se está dejando contaminar con Podemos, que es el antiguo partido comunista, pero más radicalizado, sangriento, agresivo y sin absolutamente nada que aportar a la sociedad.

Desgraciadamente está ganando Podemos y el PSOE va a salir muy mal parado de todo esto

¿Y el país, cómo va a salir de todo esto, qué es lo que importa?

Esta crisis primero se va a llevar por delante a Pedro Sánchez. Hasta ahora estamos con una contenida rabia, viendo las decenas de miles de muertos, pero el día que los ciudadanos puedan salir a la calle para expresar su indignación, lo harán.

Nadie entiende cómo se ha tratado a los mayores, ni por qué el Gobierno ha decidido quiénes tienen que morir y quiénes no. Es la prueba de la contaminación de Podemos, que tiene siempre la peor combinación, la peor receta para todo, el peor corazón y el más negro.

¿Usted culpa al presidente del Gobierno de los 17.500 muertos?

Yo no digo que sea culpable de 17.500 muertes, pero sí que tiene mucha responsabilidad. El otro día, le llamaron en el Congreso, Pedro "el sepulturero", y yo lo comparto. Él quería pasar a la historia por ser el que desenterró a Franco y va a acabar siendo el que enterró a decenas de miles de españoles. Eso no se lo va a poder quitar de encima por mucho que siga con sus mentiras.

¿Nos enfrentamos a una crisis económica mayor que la del 2008?

Pienso que es la peor crisis económica de España desde la Guerra Civil. El momento es dramático. Tenemos el peor dato de paro desde que hay registros y el peor dato de crecimiento desde la Guerra Civil. Seríamos unos absolutos insensatos si no tomamos medidas urgentes. La desgracia es que tenemos el peor gobierno posible, en el peor momento posible.

¿Qué opina de los Ertes y otras medidas en apoyo de autónomos y pymes?

Hay una gran improvisación y una falta de conocimiento de las medidas que hay que tomar. Están descubriendo medidas que no son suyas, por ejemplo, el Erte no es su invento, sino de Fátima Báñez en el gobierno del PP. Pero más allá, las señales son nefastas.

Dicen que van a prohibir los despidos, en un momento en el que hay empresas que están a punto de quebrar y quizás podrían sobrevivir reduciendo algo la plantilla

¿Y cuál es su apuesta?

Una medida que nos parece más inteligente y barata: que durante tres meses -situación extrema-, el Gobierno asuma las nóminas de todos los trabajadores españoles, tanto los que están en el sector público, a los que ya se les paga, como a los que están en el privado, incluidos los autónomos.

Se conseguirían dos grandes efectos: primero, que las empresas no quiebren, y segundo, que los trabajadores, ni pierdan su empleo ni sus ingresos. Además, a los que tienen que ir a trabajar y se expongan a mayor riesgo -policías, sanitarios, reponedores de supermercados, camioneros, etc- se les pagaría un incremento del 20% de prima.

Es como un ingreso mínimo vital de Podemos, pero para todos, ¿no?

No, es lo contrario. Nuestro modelo es salvar el tejido productivo. El modelo podemita, populista, es arruinar a las empresas y amenazarlas con la expropiación. Pablo Iglesias quiere hundir la economía para luego ir expropiando y tener a la gente con una renta mínima vital que dependa del Estado.

Pero vamos, nadie que tenga un mínimo conocimiento económico puede creerse lo que dice Iglesias. Él insiste en que paguen los ricos, pero, aunque se expropiara todo el dinero y los bienes de todas las grandes fortunas, no habría dinero suficiente.

No hay ricos en España para pagar un sueldo a todo el mundo por no hacer nada. Iglesias dice eso desde su confortable sillón aplicando una teoría política alejada de la realidad, que es la que él enseña en la facultad.

Esa idea es extraterrestre, marciana y no se sostiene

Los autónomos y pymes van a dejar de ingresar 34.000 millones. ¿Son los grandes olvidados?

Hemos pedido el aplazamiento de las cuotas de los autónomos, del IRPF y la suspensión del adelanto del Impuesto de Sociedades que tienen que pagar los autónomos, los pequeños empresarios y los comerciantes hasta que esto pase.

¿Qué han hecho ellos?, lo contrario. Este Gobierno está mandando señales que amenazan la economía y provocan que la gente tenga miedo, tanto los empresarios como los autónomos o los trabajadores. Están en una batalla ideológica con cincuenta años de retraso, describiendo un mundo de oprimidos y opresores que en nada se parece a la realidad de la economía española de autónomos y de pymes.

Si pactos de la Moncloa y sin presupuestos, ¿cómo se mira al futuro?

Tenemos una enorme confianza en los españoles, que somos la mejor materia prima. Vamos a estar por encima de nuestros peores gobernantes. Seremos capaces de salir adelante al margen de lo que ellos hagan, pero vamos, yo creo que Sánchez e Iglesias no van a durar mucho después de esto. Hasta los socios de la investidura les están abandonando.

¿Qué piensa cuando les acusan de miopía partidista y de querer sacar tajada electoral de esta crisis?

Siempre hemos defendido posturas que al principio parecían impopulares y luego se han demostrado acertadas. Jamás utilizaríamos una crisis como ésta para conseguir rédito electoral, tenemos principios y unas convicciones, al contrario de otros partidos.

Por eso nos sigue votando la gente, aunque algunos nos acusen de todo, con la complicidad de algunos medios de comunicación a quienes el Gobierno está dando dinero.

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