
La confianza de los inversores en la Eurozona cae en febrero de forma moderada y menos de lo esperado por el consenso de mercado. Así lo refleja el índice elaborado por la agencia alemana Sentix a través de encuestas a 1.086 inversores (257 de ellos institucionales), que se mantienen optimistas porque el impacto del coronavirus surgido en Wuhan (China) sea "limitado" y no impida la esperada recuperación económica.
El indicador publicado este lunes se sitúa en el segundo mes del año en 5,2 puntos, cayendo "solo 2,4 puntos", "de forma moderada", después de tres meses de subidas, como explica en nota de prensa Manfred Hübner, director general de Sentix.
"Aún hay esperanza de que la economía continúe recuperándose"
En enero creció a 7,6 puntos y la previsión del consenso de analistas era que el índice bajara este mes a 4,1 puntos. Sin embargo, la referencia ha sido más positiva de lo pronosticado. "Aún hay esperanza de que la economía continúe recuperándose", explica Hübner en el informe publicado hoy.
Este experto alemán recuerda que 2020 comenzaba con "un claro escenario de recuperación para la economía global" ante la firma de la Fase 1 del acuerdo comercial entre Estados Unidos y China, que reducía las tensiones arancelarias entre las dos mayores potencias del planeta. Pero el brote del coronavirus cambió la situación "significativamente".
Beginning of the year there was a clear upswing scenario for the global #economy, the outbreak of the corona virus in China has changed the situation. However, the effects on the economy have been relatively limited from the point of view of the investors. https://t.co/Tya4rhGFEQ pic.twitter.com/uV8GfCnL1K
— sentix (@sentixsurvey) February 10, 2020
Este tipo de neumonía surgida en Wuhan, cuyo origen es aún desconocido, ha provocado la muerte de más de 900 personas. O lo que es lo mismo, ha causado más fallecidos que la pandemia del SARS en 2003.
Por ello el potencial impacto negativo en la economía de China, la segunda mayor del mundo, y en la economía global ('por contagio') ha sido precisamente la principal preocupación de inversores y analistas en las últimas semanas.
"Las drásticas medidas tomadas por el gobierno chino para la región de Hubei [donde surgió el virus] muestran el peligro para la economía mundial si el brote no puede limitarse regionalmente", señala Sentix.
Como apuntan los analistas de la firma independiente Link Securities en su informe diario, los científicos esperan que la propagación del coronavirus alcance su pico "entre mediados y finales" de este mes de febrero.
De esta forma, "si no se hace evidente en los próximos días que la propagación del virus ha sido eliminada", anticipa la agencia germana, "es probable que el efecto negativo sea mucho mayor".
Impacto "limitado" del coronavirus
Pero por ahora no cunde el pánico entre los inversores de la zona euro, ya que consideran que los efectos negativos en la economía "han sido relativamente limitados" hasta el momento, según muestra el índice de confianza de Sentix.
La fortaleza de la economía de Estados Unidos también es un motivo de tranquilidad. Para Hübner, la situación global sigue siendo "relativamente buena" gracias a la resilencia o capacidad de recuperación del país norteamericano.
La semana pasada se conoció que las manufacturas estadounidenses repuntaron en enero, al contrario de lo esperado por los expertos. El índice elaborado por el Instituto de Gestión de Suministros (ISM por sus siglas en inglés; Institute for Supply Management) volvió a situar al sector secundario de EEUU en niveles de expansión.
Tranquilidad también respecto a Alemania
Asimismo, los inversores de la zona del euro se muestran "relativamente relajados" ante la situación económica en Alemania, la 'locomotora' del Viejo Continente.
Sin embargo, los datos de la industria del país publicados la semana pasada volvieron a despertar al fantasma de la recesión. Además, tal y como subraya Sentix, su economía está "estrechamente relacionada" con la de China por las exportaciones e importaciones.
"La capacidad del gobierno alemán para actuar todavía tiene que demostrarse", asegura Manfred Hübner. Y si la situación mundial se complica, Berlín va a depender en gran parte de "reacciones valientes" no solo en materia sanitaria, sino también en política económica.