
El año 2020, que hasta ahora ha sido muy duro en bolsa, ha sido mucho más benévolo con aquellos inversores que decidieron poner sus huevos en la cesta americana. Tanto, que desde hace unas semanas ya incluso se gana en el año si has invertido en el S&P 500, por ejemplo. Y mucho más, hasta un 20%, si la apuesta ha sido la tecnología pese a la fuerte crisis destapada por el coronavirus a finales de febrero.
Pero esto solo ocurre si el inversor es americano, ya que si procede de Europa y, en consecuencia, su divisa local es el euro, vería reducida su rentabilidad en casi un 5% en lo que va de año a causa precisamente de la depreciación del dólar frente a la moneda comunitaria.
Así, de los más de 4 puntos porcentuales de ganancias del S&P 500 se pasarían cercanas al 1% -a media sesión del miércoles-. En el caso del Dow Jones, se suman más de 4 puntos al 2% que cede desde el 1 de enero. Por su parte, en el Nasdaq la rentabilidad obtenida se reduce hasta el 16,2%. Esto deja una diferencia de apenas un punto entre el S&P 500, que está cerca de máximos, y el Dax alemán para el que está posicionado desde el Viejo Continente.
El cruce, que comenzó siendo alcista para el billete verde, se tornó negativo hace varias semanas, llevando al euro a intercambiarse por casi 1,18 dólares, algo que no había sido posible desde mayo de 2018. Este movimiento ha venido tanto por la fortaleza reciente del euro, "apoyada por el acuerdo en el Consejo Europeo para tramitar el Fondo de Reconstrucción", apuntan desde Afex, como por la debilidad del dólar, que según Bank of America, "ha llegado con un cierto decalaje tras las reducciones drásticas de los tipos de interés a finales de febrero y comienzos de marzo".
En las últimas sesiones, no obstante, ha habido una reacción alcista por parte de la divisa americana, "que responde a la fortaleza macro que está mostrando en los últimos registros de actividad económica con respecto a la eurozona", explican desde Monex.
Esto casa con la perspectiva que tienen los expertos de divisas de DWS, que esperan un mayor repunte del dólar a corto plazo. "Ahora es más que probable ver sorpresas negativas para el euro, como el aumento de los infectados. Las elecciones en EEUU se acercan y podrían traer subidas de impuestos. Además, esperamos más medidas fiscales por parte del ejecutivo de Trump, mientras que el Fondo de Reconstrucción en Europa es difícil que se expanda más", sugieren los analistas de la gestora.
No solo ha sido un viento de cara en bolsa, sino también para aquellos que hayan comprado deuda denominada en dólares, como el T-Note, que da más de un 9% de ganancias por precio en el año.
Las perspectivas para el cruce no son mucho más alcistas para el euro, al menos, en el corto y medio plazo. El consenso de analistas que recoge Bloomberg ve el par en el 1,16 a final de año. Es decir, ve una ligera subida del dólar. Es por esto por lo que, a priori, parece no merecer la pena cubrir la divisa para un inversor en euros, ya que la divisa no tiene mucho más recorrido al alza tal y como apuntan los expertos encuestados.
Una prueba de que esto es compartido por gran parte del mercado es que el coste de la cobertura a tres meses se encuentra por debajo de los 0,75 puntos porcentuales, que es una zona de mínimos no vistos desde 2015, cuando el euro, eso sí, se intercambiaba por 1,10-1,15 dólares aproximadamente.
El euro, a ponerse en positivo frente las divisas más negociadas
Si hay una divisa que esté registrando un movimiento opuesto al que vive el dólar estadounidense en las últimas semanas, ese es el euro. Desde Ebury señalan que la moneda única continúa fortaleciéndose en su cruce frente al billete verde, y hacen especial hincapié en el movimiento alcista de la divisa europea a pesar del contexto negativo en el que se produce con los últimos datos sobre el Covid-19 salidos de Europa repuntando: "La fuerza constante del euro/dólar es un indicador del nivel hasta el que llega el pesimismo por el dólar en este momento", señalan.
Sin embargo, el movimiento alcista en el euro no solo se sustenta en una debilidad manifiesta del billete verde. En lo que ha transcurrido de 2020, la moneda única se revaloriza frente a 7 de sus 10 cruces más negociados del planeta, y ya está a menos de un 1% de conseguir hacerlo frente a la corona danesa y frente al franco suizo.
De hecho, frente a la divisa helvética, ya logró a mediados de junio cotizar por encima de los niveles a los que comenzó el par en enero, y según el consenso de mercado recogido desde Bloomberg, las previsiones de los analistas apuntan a que lo logrará a comienzos de 2021, cuando el cruce entre ambas supere los 1,09 francos por euro. En este sentido, son los analistas del departamento de estudios de Morgan Stanley los que se muestran más optimistas al respecto, al ver al par en 2021 cotizando en los 1,20 enteros.
La única divisa frente a la que el euro no logra alzas en lo que va de año es frente a la corona sueca que se mueve un 2,3% por encima de los niveles marcados en enero.