Bankinter deja atrás el bocado del impuestazo y dispara un 54% el beneficio durante el primer semestre. El banco ganó 417,9 millones de euros entre enero y junio, espoleado por un escenario de subida de tipos que mejora un 60% el margen financiero y gracias al crecimiento en negocio y clientes. Su cuenta bate la proyección del mercado, que esperaba un aumento del 49,08%, hasta situar el resultado en 404 millones, de acuerdo al consenso de Bloomberg.
La expansión de la cuenta tiene lugar pese a que tuvo que destinar 77,5 millones de una tacada en marzo para pagar el impuesto fijado por el Gobierno a la banca sobre el 4,5% del margen financiero y comisiones, y le ha permitido recuperar niveles de rentabilidad inéditos durante años.
La rentabilidad sobre recursos propios (ROE) ascendió al 15,5% frente al 10,1% que presentaba hace un año y la calculada sobre recursos tangibles (ROTE) alcanzó el 16,4%.
El banco liderado por María Dolores Dancausa explicó a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que consolida el crecimiento "en todas las líneas de negocio y distintas geografías en las que opera, en las cuales ha seguido ampliando cuota de mercado, con crecimientos tanto en volumen de negocio como en nuevos clientes".
En actividad, la entidad logró crecer casi un 3% en inversión crediticia, sobre todo, por el negocio internacional. En España, elevó un 0,4% este volumen a contracorriente de la industria que ha experimentado un retroceso del 2,1% en términos de caída media con datos a mayo del Banco de España.
En la parte de recursos minoristas con clientes, su saldo creció un 0,5%, aunque experimentó una expansión del 11,9% en los recursos fuera de balance como son los fondos de inversión, fondos de pensiones y gestión patrimonial y sicavs.
Una evolución que ayudó a que "todos los márgenes de la cuenta experimentan crecimientos muy notables", conforme al propio banco, que lo atribuye al crecimiento en negocio y, de manera especial, a los "productos de valor" con capacidad para generar mayores ingresos, y a las subidas de tipos.
El margen de intereses se disparó así un 60,5% con una "buena gestión de los diferenciales" con clientes y el margen bruto, más asimilable a una partida de ingresos, creció un 32,7% y ascendió a 1.277,9 millones, mientras que el margen de explotación avanzó un 54,3%, pese que los costes crecieron un 5,7%. Las comisiones construyen un 22% del margen bruto, excluyendo el impuesto a la banca -aportaron 300 millones-.
Gana cuota de mercado
Por tipo de negocio, la división de Empresas, que es la que mayor contribución realiza al grupo, registró crecimientos del 0,5% en la cartera de inversión, hasta 31.200 millones de euros y pese a que en España cae un 0,5% (-2,2% en el conjunto del sector bancario). En la relativa a la Banca Internacional con empresas, sin embargo, aumentó un 3%.
En la banca con particulares y donde el banco tiene foco especial en los clientes de mayor patrimonio, elevó un 11% los recursos gestionados en su Banca Patrimonial, con 2.400 millones captados solo en el semestre. En la parte más retail, este parámetro creció un 7% e incorporó un 5% más de clientes con ingresos domiciliados gracias a su Cuenta nómina, aunque sus saldos retroceden un 13% por que, según el banco, movieron sus recursos a otro tipo de producto.
Por la parte del crédito, la cartera hipotecaria aumentó un 0,4% mientras que en el sector desciende un 2,4%, con datos a mayo, si bien su nueva producción disminuye un 16% en comparación con el mismo periodo del pasado año por la baja actividad en el mercado inmobiliario.
El negocio en Portugal aumentó un 14% en crédito y el 6% en recursos de clientes, con una expansión del 184% en el beneficio bruto de la franquicia, y la financiera Bankinter Consumer Finance mejoró un 39% la cartera financiada. EVO Banco, su marca digital, elevó a su vez un 38% el negocio crediticio.
La progresión en negocio y márgenes se reflejó por igual a los ratios de solvencia y calidad de balance. Su ratio de capital CET1 fully loaded alcanzó el 12,3%, con una diferencia de 4,5 puntos porcentuales por encima del 7,73% mínimo regulatorio exigido a Bankinter y situó la liquidez en el 105,5%, en su medición de depósitos sobre volumen de crédito (al cierre de año era el 102,8%).
La morosidad se mantuvo en el 2,2% frente al 2,1% de hace un año, con una hucha de provisiones que cubre al 64,7% la exposición en activos morosos; y el ratio de eficiencia o parte de los ingresos que consumen los costes de explotación bajó al 35,4%, inferior también al 44,4% de hace un año (del 33,4% en España).