Duro Felguera afronta la junta de accionistas sin un acuerdo bajo el brazo con la banca, sin el inversor que las entidades le han exigido y con un recorrido en bolsa que dibuja una caída del 43,8 por ciento en el último año. A todo esto se suma ahora la amenaza plausible de quedarse sin los dos contratos en Brasil que se adjudicó en mayo 2015 por cerca de 800 millones de euros, lo que representa más de una tercera parte de su cartera de negocio, que hasta marzo ascendía a 2.226,5 millones.