Redactora de Audiencias en elEconomista.es. Escribo sobre los dos mayores placeres de la vida: comer y viajar. Me gradué en Periodismo y Comunicación Audiovisual por la Universidad Rey Juan Carlos y cursé un máster en Gestión de Televisión en la Universidad Complutense de Madrid. Escribir, comunicar y compartir me viene desde siempre. Di mis primeros pasos como redactora web en Atresmedia, me puse frente a las cámaras de Telemadrid para intentar hacer la economía más accesible y ahora trabajo para contarte la historia que hay detrás de cada lugar.

El queso, o lo amas o lo odias. Este alimento al igual que levanta pasiones, también tiene a unos cuantos en su contra. Ahora bien, si eres del primer grupo, estarás de acuerdo con que una de sus principales cualidades es que hay prácticamente tantos tipos como personas, y todos ellos igual de deliciosos. Lo que no todo el mundo sabe es que el líquido que en ocasiones acompaña al queso también puede utilizarse.

Depende de a quién preguntes y dónde, pero para muchos el whisky es más que una bebida. Conocido como símbolo de unión y tradición, realmente desempeña un papel enormemente importante en la cultura de Escocia desde hace más de 500 años. En aquel entonces se conocía como 'Uisge Beatha' o 'agua de la vida', una traducción del gaélico que sigue teniendo sentido a día de hoy para los amantes de la bebida.

A pocos días de la llegada oficial del verano, lo sí ha venido para quedarse es el calor, que ya forma parte de nuestro día a día. Con ello, por supuesto cambian nuestras rutinas, nuestro armario y también nuestra alimentación. Durante esta época, lo que nos pide el cuerpo son platos y recetas ligeras y que resulten refrescantes. En el tema comidas parece estar mucho más controlada la situación, gracias a la multitud de tipos de ensaladas que hay, sopas frías o recetas tradicionales como el salmorejo o el gazpacho.

El verano es sinónimo de calor, playa, piscina, vacaciones y, por supuesto, recetas refrescantes y ligeras. Encontrar comidas que reúnan estas condiciones parece mucho más sencillo, pues es muy fácil optar por ensaladas fresquitas o sopas frías. Ahora bien, aunque exista el prejuicio de que la repostería es tediosa y bastante pesada, hay otras opciones igual de deliciosas que una buena tarta de chocolate, pero mucho más ligeras.

Todas las miradas vuelven a apuntar a Paco Roncero y a su 'bocadillo perfecto'. Años después de que las redes sociales colapsaran y se llenaran de comentarios ingeniosos, el reconocido chef madrileño con dos Estrellas Michelin lo ha vuelto a hacer. Junto con Aceites de Oliva de España, ha versionado aquel bocadillo que conquistó el paladar de los españoles y, por supuesto, a este tampoco le falta un buen chorrito de aceite. Pues, como él bien dice: "Lleva la cantidad de aceite de oliva virgen extra que tiene que llevar".

En cuanto el calor empieza a apretar, lo más normal es querer escapar de la ciudad. Muchas veces no nos es posible irnos tan lejos como nos gustaría, ya que las responsabilidades nos obligan a quedarnos cerca. No obstante, aunque en Madrid no encontremos las maravillosas playas del sur de España o el olor a salitre tan característico del Mediterráneo, aquí también es posible huir del calor.

Una de las grandes ventajas de Madrid es que, sea la época del año que sea, es posible disfrutar de una infinidad de planes. Y, aunque aquí no haya playa, una de las grandes imprescindibles durante el verano, no hace falta que nos desplacemos hasta la costa para refrescarnos, pues también es posible darse un chapuzón en la Comunidad. En pleno corazón, existe un lugar que combina a la perfección naturaleza y relax, donde poder disfrutar de una experiencia única.

A pesar de que nuestros cinco sentidos estén convencidos de que nos encontramos en el sur de España, esta típica postal andaluza se encuentra en la provincia de Tarragona, concretamente a menos de una hora de Barcelona. Este rincón sorprendente es una de las zonas menos conocidas de la Costa Dorada, pese a sus encantos. Ahora bien, el lado positivo de que todavía los turistas no hayan conquistado cada centímetro, es que se puede disfrutar de su ambiente y del mimo de cada rincón.

Es una realidad que el calor ha llegado para quedarse y al igual que hacemos el cambio de armario y nos deshacemos de las mantas y los nórdicos de la cama, también debemos adaptar nuestra rutina y nuestro recetario. Cocinar, descansar o simplemente pasar tiempo en casa puede convertirse en un verdadero reto si no contamos con un espacio pensado contra las altas temperaturas. Es por ello, por lo que nuestro cuerpo nos pide más que nunca recetas ligeras y refrescantes.