Marcos Suárez Sipmann
El acuerdo comercial alcanzado entre México y EEUU es una sorpresa esperanzadora. Ambos países ganan. México porque está ante un escenario distinto al que tenía hace año y medio. Entonces Donald Trump, además de exigir que pagara el muro (en lo que insiste), amenazaba con cancelar el tratado y cerrar la frontera. El anuncio contradice la retórica del magnate que aseguraba que todos los acuerdos existentes no firmados por él eran malos. México respira y la prueba ha sido una inmediata recuperación del peso y la reacción positiva de los mercados financieros. EEUU también tendrá beneficios.