Es evidente que habrá un antes y un después, en el sector farmacéutico, tras la pandemia mundial a la que nos hemos visto abocados. La salud es ya hoy un concepto 'one health'. Un ecosistema con un numerador extraordinariamente enriquecido y un único denominador: salvar vidas. Las diferentes áreas de la investigación y las nuevas tecnologías aplicadas a la salud han dado un giro definitivo hacia una nueva realidad, que mejora y amplifica el papel de la ciencia al servicio de la salud de la persona. Y el sector ha asumido una gran parte de esa responsabilidad.