Lo conocí en su célebre Museo Internacional de Bebidas cuando yo tenía 14 años y él más de 60. El encuentro tuvo su historieta. El periodista Miguel Ors me encontró una mañana en el aeródromo de Barajas entrevistando a los ciclistas, que iban a participar en el Tour de Francia, para la revista juvenil donde empecé a publicar. Por lo visto, le hizo gracia encontrarse con un colega infantil, así que me sacó en la tele de aquel día, lo llamé al periódico al día siguiente para agradecérselo y me dijo que si quería conocer la redacción del diario Pueblo, cuya sección deportiva dirigía. Así que, tan emocionado, dos días después hice pellas en el instituto y acudí a la calle Narváez, 70, donde estaba el periódico.