Corresponsal en Bruselas

La multa que España impuso el pasado noviembre a aerolíneas de bajo coste por cobrar por el equipaje de cabina llega hasta Bruselas. La Comisión Europea ha iniciado un diálogo “informal” con las autoridades españolas para determinar si abre un proceso de infracción formal contra España por imponer esta sanción, para determinar si se acoge a la normativa comunitaria.

El Banco Europeo de Inversiones (BEI) cierra su primer año con la exministra de Economía, Nadia Calviño, al frente de la entidad. Un ejercicio en el que España se vuelve a situar en segundo lugar entre los países de la UE que han recibido más financiación de la entidad, con 12.300 millones de euros. La cifra, supera los 11.380 millones del ejercicio anterior y España se posiciona como segundo mayor receptor de la UE, por detrás de los 12.600 millones de euros de Francia.

La economía de los países del euro registró un crecimiento del 0,7% en 2024, que supone tres décimas por encima de los datos registrados durante el ejercicio anterior. Una cifra que arroja signos de recuperación de la economía tras el golpe que supuso la crisis energética derivada de la invasión militar rusa de Ucrania. Sin embargo, la evolución del PIB de los Veinte en la recta final del año se ralentiza, con un estancamiento en los últimos tres meses del ejercicio.

La Comisión Europea ha puesto sobre la mesa este miércoles la que será la hoja de ruta para impulsar la competitividad europea en los próximos cinco años. Un plan, bautizado como Brújula de Competitividad, que plantea un vigésimo octavo régimen para la insolvencia y la fiscalidad empresarial a nivel comunitario, la simplificación administrativa y regulatoria pero no deja claro si se abre la puerta a una nueva emisión de deuda conjunta a nivel comunitario.

La Comisión Europea arranca el nuevo mandato cumpliendo uno de sus grandes compromisos de legislatura, presentará este miércoles su hoja de ruta para impulsar la competitividad de la UE y no perder la carrera frente a Estados Unidos y China. Una desventaja de la que quedó plena constancia en el Foro Económico Mundial que tuvo lugar la pasada semana en Davos. Es así que la llamada Brújula de Competitividad de la UE se centra en gran medida en dar un impulso a las pymes comunitarias: lanzará un fondo de Competitividad para impulsar sectores estratégicos, favorecerá a las empresas comunitarias en la contratación pública y mejorará el acceso a financiación de las pymes.

En la nevada localidad suiza de Davos se congregaba la pasada semana la élite económica mundial para abordar los retos de la fragmentación y la incertidumbre geopolítica. Bajo tal reflexión, subyace una pregunta clave para Europa, ¿qué papel quiere jugar en la carrera contra potencias como EEUU y China? Los diálogos dejaron entrever la debilidad de un bloque comunitario, lastrado en competitividad y productividad. También la amenaza de que se quede rezagado a nivel económico y tecnológico. Y un desafío: lograr mantener un papel de mediador entre el país norteamericano y el gigante asiático.

El tradicional cierre del Foro Económico Mundial ha tenido como centro de la conversación las perspectivas para este ejercicio. Una diálogo en el que la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, ha instado a "respetar las reglas", "crear un marco de confianza" y avanzar en la unión de mercados de capitales de la Unión Europea (UE) ante la amenaza arancelaria del nuevo presidente estadounidense, Donald Trump, y sus críticas en la jornada de ayer a un trato injusto por parte de la UE.

Era una de las intervenciones más esperadas. Tan sólo cuatro días después de haber inaugurado su mandato, el presidente estadounidense, Donald Trump, ha intervenido por videoconferencia en el Foro Económico de Davos. Una intervención en la que ha avisado de que impondrá tasas más elevadas a los productos que no se fabriquen en suelo estadounidense, en el que ha cargado contra los lentos procesos de la UE y sus multas a compañías estadounidenses, ha sugerido que la OPEP debe bajar el precio del petróleo y ha puesto el foco en terminar con la guerra de Ucrania.

El consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, ha pedido que la descarbonización en la UE vaya acompañada de la industria y del desarrollo tecnológico que hay en Europa. El directivo de Repsol ha abogado por la “neutralidad tecnológica” en una crítica a que se haya impulsado el vehículo eléctrico en detrimento del híbrido o el de combustión.

China, Canadá, México y la propia Unión Europea se incluyen en la lista de amenazados por el nuevo presidente estadounidense, Donald Trump con un incremento de las tasas arancelarias. Uno de los principales riesgos radica en una ola de represalias que podría dar lugar a una guerra comercial. Una situación que sería “catastrófica” en palabras de la directora general de la Organización Mundial del Comercio (OMC), Ngozi Okonjo-Iweala, que ha advertido de los perjuicios que generaría para el crecimiento mundial y ha llamado a la calma.