
El Banco Europeo de Inversiones (BEI) cierra su primer año con la exministra de Economía, Nadia Calviño, al frente de la entidad. Un ejercicio en el que España se vuelve a situar en segundo lugar entre los países de la UE que han recibido más financiación de la entidad, con 12.300 millones de euros. La cifra, supera los 11.380 millones del ejercicio anterior y España se posiciona como segundo mayor receptor de la UE, por detrás de los 12.600 millones de euros de Francia.
La entidad capitaneada por Nadia Calviño ha hecho públicos este jueves sus resultados de 2024. Un ejercicio que evidencia un aumento de inversión de un 8% respecto al año anterior y que ha conseguido movilizar 45.370 millones de euros en inversiones para España, en un ejercicio en el que el BEI ha elevado su inversión hasta un récord de 89.000 millones de euros.
El grupo BEI, que aglutina al Banco Europeo de Inversiones y al Fondo Europeo de Inversiones (FEI), ha conseguido movilizar, a través de esta financiación, 100.000 millones de euros en inversiones para proyectos en nuevas infraestructuras, como redes de distribución de electricidad, renovables, proyectos de cero emisiones, de almacenamiento energético y de eficiencia energética.
Si Francia es el país que ha recibido más financiación seguida de España, en tercer lugar, se encuentra Italia, en donde el BEI ha invertido 11.000 millones de euros. Le sigue en la lista Alemania, con 9.600 millones y, ya de lejos, Polonia, con 5.700 millones.
La española ha reforzado la intención de que la entidad que preside se convierta en el "banco del clima", como ha apuntado en rueda de prensa. La partida de inversión verde aglutina el 60% de la financiación total, hasta los 51.000 millones de euros a proyectos que climáticos y de sostenibilidad medioambiental. Se suman a los 31.000 millones destinados a iniciativas vinculadas a la eficiencia energética y a los 1.000 millones para proyectos de defensa.
El de defensa es precisamente uno de los segmentos en los que el BEI está llamado a aumentar la financiación. Calviño ha incidido en que la entidad ha duplicado los niveles de inversión respecto al ejercicio anterior y que pretende cumplir el mismo objetivo este año, para llegar hasta los 2.000 millones de euros. Pero lo cierto es que, si una de las prioridades del nuevo mandato del Ejecutivo de Ursula von der Leyen radica en la defensa, el BEI está llamado a jugar un papel más relevante en este sentido.
Catorce líderes de la UE pedían el pasado marzo que el BEI ampliara su rango de inversiones. Reclamaban "adaptar su política de préstamos a la industria de defensa" así como ampliar la definición que aplica a los proyectos con fines duales (es decir, civiles y militares)", en un mensaje que abogaba por flexibilizar tal concepto. Un mandato que fue acogido por beneplácito por el brazo inversor de la UE pero que Calviño se resiste a aplicar.
"No somos un ministerio de Defensa", ha afirmado Calviño en rueda de prensa tras ser preguntada en reiteradas ocasiones sobre los motivos por los cuales la entidad no financia más inversiones en el segmento puramente militar. Cabe recordar que, en abril, el BEI planteaba relajar los requisitos que limitaban que la entidad destinase más financiación a proyectos de seguridad y defensa. Lo hacía con un plan dotado de 6.000 millones de euros para inversiones en defensa y que, al tiempo, planteaba una revisión de los conceptos de tecnologías e infraestructuras de uso dual para ampliar las iniciativas que pueden ser objeto de financiación de la entidad.
"Estamos cumpliendo el mandato de los jefes de Estado y Gobierno de aumentar el apoyo de Europa a la industria de Seguridad y Defensa al tiempo que se salvaguarda nuestra capacidad de financiación", ha defendido Calviño. La española ha recordado que el BEI ha realizado una gira en la UE para abordar las necesidades de los diferentes gobiernos y del sector privado en términos de defensa. Además, se ha referido a la iniciativa lanzada en diciembre, dotada de 1.000 millones de euros, para financiar pymes en la cadena de suministro de defensa en Europa.