Corresponsal en Bruselas

Los auditores de la UE advierten del riesgo de que se produzcan duplicidades en la financiación europea, en la que diferentes partidas podrían ir destinadas a los mismos objetivos. En su último informe avisan de que los grandes importes del plan de Recuperación pueden solaparse con la financiación del presupuesto comunitario. Además, consideran que los mecanismos de control puestos en marcha por Bruselas son insuficientes para evitar el riesgo de la doble financiación.

Bruselas propondrá una nueva legislación para deportaciones en una Unión Europea que evidencia profundas confrontaciones sobre la implantación del modelo de la italiana, Giorgia Meloni, de crear centros de acogida de migración irregular en países terceros. Con el foco puesto en el problema migratorio, los líderes de la UE han respaldado este jueves “soluciones innovadoras” para atajar la cuestión.

España remitía a Bruselas el pasado 15 de octubre su plan fiscal estructural, es decir, la hoja de ruta para la reducción de la deuda y el déficit de los próximos años, que marcará la estrategia presupuestaria a seguir por el Ejecutivo español. El plan de Moncloa contempla que el gasto primario neto experimentará un incremento del 3% en los siete años que abarca, una cifra que se eleva dos décimas respecto a las recomendaciones de Bruselas y que supone unos 1.200 millones más.

El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, ha llevado este jueves a Bruselas su plan para la victoria para acabar con el conflicto militar que mantiene abierto con Rusia desde hace casi tres años. La Cumbre de líderes de la UE ha sido el momento escogido para lanzar una advertencia: Corea del Norte ha movilizado personal militar al territorio ucraniano ocupado por el Kremlin, un movimiento que, ha asegurado, "es el primer paso para una guerra mundial".

El 15 de octubre marcaba la fecha límite para que los países del euro remitieran a Bruselas su plan presupuestario para el próximo ejercicio. España ya anunció la pasada semana que rebasaría el plazo y dilataría en el tiempo la entrega de las cuentas del año que viene. Pero la Comisión Europea no está conforme con tal retraso. El Ejecutivo comunitario ha insistido a España que debe entregar los presupuestos para 2025 "lo antes posible".

La compra de Monsanto por parte de Bayer ha derivado en una transformación en el seno de la compañía que, con esta operación, trataba de darle un impulso a su división agrícola, Bayer Crop Science. Su director para Europa, Jens Hartmann, considera que la integración se ha realizado con éxito. La compleja situación que atraviesa Bayer, con una caída en su cuenta de resultados, la achaca a un factor más vinculado al mercado, más cíclico, que a la operativa de la compañía. Aunque la firma alemana trata de transmitir seguridad a los inversores pese a los litigios que arrastra de Monsanto. Ante la reapertura, la pasada semana, de un nuevo caso legal en Estados Unidos, manda un mensaje de confianza, apoyándose en el veredicto de los organismos reguladores y de las evaluaciones científicas.

Se presenta una semana intensa para España de cara a tachar de su lista las tareas pendientes ante Bruselas. El próximo día 15 está marcado en el calendario como la fecha en que deberá remitir a la Comisión Europea el plan fiscal para los próximos cuatro años, así como el borrador presupuestario para el 2025. El Ejecutivo español ya avanzó su intención de cumplir con el plazo límite para el primero de los documentos, sin embargo, corre el riesgo de recibir un nuevo aviso de Bruselas, ya que no prevé presentar las cuentas del próximo ejercicio a tiempo.

El sistema español de control y vigilancia de los fondos europeos sigue generando a ciertas instituciones comunitarias. Concretamente, el Tribunal de Cuentas de la Unión Europea ha advertido este jueves de que el sistema que utiliza España para realizar un escrutinio de las asignaciones de los fondos Next Generation sigue presentando deficiencias.

A España se le acumula el trabajo ante Bruselas en la recta final del año y eso afecta directamente a la tramitación prevista para 2024 de los fondos Next Generation. El Gobierno apura el paso para no descarrilar con el calendario, pero el tiempo apremia y sobre el Ejecutivo planea un retraso forzoso. A escasos tres meses de que termine el ejercicio, España debe solicitar todavía el quinto y el sexto pago del Plan de Recuperación de la pandemia para cumplir con la agenda pactada con el Ejecutivo comunitario. Y si bien reitera su intención de pedir el quinto desembolso antes de final de año, todo apunta a que, como mínimo, el sexto tramo no llegará a tiempo y tendrá que gestionarse en 2025.

A una semana de que termine el plazo para que los Estados miembro remitan a Bruselas sus plan presupuestarios, el Gobierno anuncia que se retrasará en su entrega. La Comisión Europea no ha recibido la noticia con gran entusiasmo. Si ayer apuntaba que su “flexibilidad es limitada”, además avisa a a Madrid que el límite legal para enviar los planes presupuestarios es el 15 de octubre.