Brexit

Por primera vez en la historia de la UE, los líderes europeos cerraron ayer la puerta a uno de los miembros del restringido club para discutir sobre el futuro del proyecto comunitario. Porque, tras el portazo de los británicos, al resto de 27 socios no les quedó más remedio que dejar en el felpudo al primer ministro británico, David Cameron. La discusión sobre la mesa no sólo era sobre cómo gestionar este divorcio de consecuencias aún desconocidas, sino también sobre cómo mantener la UE a flote.

Consecuencias del Brexit

La onda expansiva de la salida del Reino Unido de la UE se ha extendido desde el partido conservador británico hasta Cataluña. Porque la apuesta perdida del primer ministro británico, David Cameron, ha provocado que la jefa del Gobierno regional de Escocia, Nicola Sturgeon, se lance en una renovada cruzada para conseguir la independencia de su región para así permanecer dentro de la Unión.

Los líderes presionan a Cameron

Los ocho años de crisis han dejado agrios cruces de palabras, feos institucionales y reuniones hasta altas horas de la mañana para evitar que el euro, o incluso la UE, se rompiera en pedazos. Paradojas de la vida, los líderes europeos no pelearon este martes por salvar a Europa de una fractura, sino más bien por acelerar un divorcio. Porque con el 52% de los británicos a favor de cortar amarras con la Unión Europea, la cumbre celebrada en Bruselas tuvo como objetivo presionar al primer ministro, David Cameron, para que notifique su deseo de salir de la UE (el ya famoso artículo 50) para empezar las negociaciones cuanto antes.

periodo de parálisis legislativa

Con gesto templado pero serio comparecieron este lunes en Berlín los líderes de Alemania, Italia y Francia. La canciller Angela Merkel resaltó la importancia de activar el artículo 50 del Tratado de Lisboa que activa la salida, antes de abordar negociaciones informales. El presidente galo, François Hollande, expresó la importancia de "no perder el tiempo" para que la salida se produzca en los mejores términos y la UE pueda seguir trabajando por la unidad, la creación de empleo, el refuerzo de la seguridad y la lucha contra el terrorismo. Más optimista se mostró Matteo Renzi, quien habló de una "gran oportunidad" para reconstruir la Unión.

Análisis | Jorge Valero

En esta Comisión Europea -bautizada por su propio presidente, el luxemburgués Jean-Claude Juncker, como la de "la última oportunidad" para ganarse a los ciudadanos- evitar la salida del Reino Unido representaba una de las máximas prioridades.