Renta fija | Flash fundamental
El mercado había respetado los bonos con vencimientos cortos por su menor sensibilidad a los tipos de interés, pero la paz se ha acabado.
El mercado había respetado los bonos con vencimientos cortos por su menor sensibilidad a los tipos de interés, pero la paz se ha acabado.
Los emergentes son la eterna promesa. Los países que llevan décadas soñando con dominar el mundo con su influencia económica y demográfica creciente. Son el inicio y el fin de las grandes historias de expansión económica del siglo XXI, entonces ¿por qué el inversor español no confía plenamente en estos países? Esa es una de las grandes preguntas sobre las que los expertos en mercados debatieron en el Observatorio de elEconomista sobre los países emergentes: Riesgo frente a oportunidad, patrocinado por el Banco Sabadell. Los analistas coinciden en en que el inversor español no explota todo el potencial que ofrecen como debería. "El porcentaje de emergentes en las carteras es del 4%", explica Antonio Salido, director de marketing de Fidelity, lo que supone estar muy lejos de lo que los fundamentales aconsejarían. "Sólo por peso en volumen total del mercado, los emergentes se mueven entre el 12 y el 13% y ajustado por demografía, un 30%", remarca, muy lejos de la exposición que tiene actualmente el inversor español. Álvaro Antón Luna, responsable de alternativos del sur de Europa y Suiza en Aberdeen, cree que las ponderaciones mínimas que debe destinar un ahorrador son del 10% tanto a renta fija como a renta variable, aunque siempre con la flexibilidad de poder adaptarse al momento.
Un avance hoy parece descabellado, pero se conocerá si los miembros de la entidad esperan que la primera subida en nueve años sea en 2015.
El incendio de la deuda empezó esta semana con más virulencia de lo que acabó la anterior. Una escalada de las rentabilidades que no respondía ni a los últimos indicadores económicos, ni a las buenas noticias que llegaban con cuentagotas desde Grecia.
Una de las cosas más difíciles para cualquier persona es romper los prejuicios y aportar su propio razonamiento al conocimiento general. Nassim Nicholas Taleb (Líbano, 1960) es un financiero e intelectual atípico, el perfecto antigurú. Antes de la entrevista saluda con una sonrisa cercana, chapurrea un par de palabras en castellano y se recuesta en su butaca, preparado para explicar su economía con calma, pero eso sí, sin paños calientes. En la entrevista concedida a elEconomista en el marco del Madrid Fund Forum celebrado esta semana en el estadio Santiago Bernabéu, desgrana la debilidad del sistema financiero, los riesgos económicos y las grandes esperanzas globales desde su particular visión del mundo.
La economía son ciclos y Estados Unidos está agotando su fase alcista. Este es un temor que se está extendiendo entre algunos economistas, que ven con pesimismo el horizonte cercano del país. El panel de expertos citados este jueves en el Madrid Fund Forum que se celebró en el estadio Santiago Bernabéu con la colaboración de elEconomista, desgranó los indicadores más importantes de la economía del país, que además son los que adelantan un futuro más incierto. "Estamos navegando el principio del fin de la recuperación", alertó Chris Watling, consejero ejecutivo de Longview Economics.
Llega la hora de la verdad. Las elecciones generales en España están a la vuelta del verano y los partidos políticos terminan de perfilar su programa económico con el que acudirán a las urnas. La expectación se centra en conocer las propuestas de los partidos nuevos, y Podemos se lleva la palma, ya que es el que tiene un peso mayor en las encuestas. Ignacio Álvarez, portavoz económico de la formación, recuperó el miércoles el tema tan controvertido de la reestructuración de la deuda en el evento Fund Forum que se celebró el miércoles en Madrid con la colaboración de elEconomista.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha retrasado de facto el impago de Grecia al permitir que el país active la cláusula de Zambia, es decir, juntar los cuatro pagos previstos en junio en un solo desembolso a final de mes, por 1.600 millones. Una dilación que en modo alguno conjura el peligro de default, pues en julio y agosto Atenas debe devolver al Banco Central Europeo (BCE) 3.500 y 3.200 millones, respectivamente, además de 628 millones al FMI. Y no tiene liquidez.
Destruir un mantra del mercado es difícil y sólo se consigue con mucha insistencia y -tristemente- cuando los inversores sufren muchas pérdidas. Este es sólo otro intento: la renta fija no es fija. Como los hechos son más contundentes que las palabras, ahí van: los ahorradores que tengan su dinero en fondos de inversión de deuda están perdiendo dinero en los últimos tres meses, ya que prácticamente todo el sector está en negativo en este plazo. ¿Por qué se produce este deterioro si el pago de los cupones es fijo? Porque el precio de los bonos cae a medida que sube la rentabilidad en el mercado y se produce una minusvalía del valor de los activos en la cartera del fondo.