Mark Zuckerberg lleva montado en una montaña rusa desde 2021. El magnate y cofundador de Facebook tocó el cielo en septiembre de ese año, llegando a amasar la friolera de 142.000 millones de dólares. Eran otros tiempos: su firma se codeaba con las más grandes, superando el billón de dólares de capitalización bursátil. Sin embargo, sus 13 meses posteriores significaron un antes y un después en el estadounidense: se dejó por el camino 100.000 millones en una de las caídas más bestias que se recuerdan en el mundo empresarial.