Un operativo conjunto de la Guardia Civil y la Policía Nacional ha detenido en Toledo a los dos presuntos autores materiales del asesinato ayer en una carretera del madrileño distrito de Fuencarral-El Pardo de Borja Villacís, hermano de la exvicealcaldesa de Madrid.
Uno de los detenidos sería Kevin Pastor, hijo de la mujer detenida el martes, y a otra persona que estaría involucrada en la muerte de Borja Villacís, acribillado a tiros en la carretera de Alcobendas a El Pardo.
Mientras que no se albergan dudas acerca de la participación de Kevin Pastor en el asesinato de Borja Villacís, la Policía trabaja para descubrir cuál es el grado de participación del otro detenido, del que se desconoce su identidad aunque podría tener una nacionalidad extranjera.
Según informa EFE, la Policía ya mantenía bajo vigilancia desde la tarde-noche del martes a los dos sospechosos, que consiguieron llegar a una urbanización de Yuncos. Desde ese momento, se esperó al momento más óptimo para su detención, que ha llegado en la tarde del miércoles.
'Operación Jaula'
En la denominada 'Operación Jaula', agentes de diferentes unidades de la Policía Nacional buscaban a dos personas, posiblemente familiares de la mujer de 52 años detenida dos horas después del crimen en un lavadero de coches de la plaza Elíptica de Madrid.
Estos dos hombres, aparentemente más jóvenes que ella, lograron huir por un descampado cercano a la M-40, donde pudieron ser recogidos por otro coche. La Policía ya los tenía identificados después de tomar declaración a los testigos y analizar el rastro policial de la arrestadas y las imágenes de las cámaras de seguridad del crimen y las que les grabaron mientras cambiaban las placas de la matrícula de su coche.
Las líneas de investigación de la Policía
En estos momentos, y según explica EFE, la Policía Nacional investiga la posibilidad de que la víctima hubiera quedado de forma previa con las tres personas que supuestamente le tirotearon, es decir, la detenida el martes y los dos nuevos detenidos en la jornada del miércoles.
A pesar de que en un primer momento los agentes del Grupo V de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Madrid tomaron como hipótesis un ajuste de cuentas, se han abierto nuevas líneas de investigación que apuntan a que Borja Villacís y los agresores pudieron haber concertado un encuentro.
De acuerdo con esa información de EFE, el escenario que se maneja es que los protagonistas del suceso se citasen en las inmediaciones del restaurante Lar de Domingo, cerca del lugar del crimen, y que la reunión derivase en ese tiroteo, a la altura del kilómetro 6 de la carretera M-612, en el distrito madrileño de Fuencarral-El Pardo.
Otra variante de esta hipótesis es que tanto Villacís como su acompañante -herido por arma de fuego, pero que pudo llegar a la Fundación Jiménez Díaz y ahora está en estado grave- fueran objeto de una emboscada en la que se les tiroteó en el interior de un Citröen de color blanco.