
Descargar la responsabilidad sobre el PP. Esa es la estrategia que ha escogido la presidenta del Congreso, Francina Armengol, ante su involucración en el caso Koldo. El 8 de mayo de 2020 la expresidenta de Baleares adjudicó 3,7 millones de euros a Soluciones de Gestión, una empresa a la que ya había contratado previamente el ministerio de Transportes con adjudicaciones por importe de 36,5 millones de euros para el suministro de mascarillas a Puertos del Estado y Adif y que, pocos días antes también, había recibido un encargo similar del Gobierno canario por algo más de 7 millones de euros.
Soluciones de Gestión es la empresa central de la trama, controlada por el empresario Juan Carlos Cueto, el cerebro de la operación. La intermediación de Koldo García, asesor del exministro de Transportes, José Luis Ábalos, permitió a esta firma entrar en la Administración Pública y colarse entre los altos cargos socialistas. Las primeras dudas que se plantean así son: ¿quién contactó con Armengol? y ¿por qué contrató a Soluciones?. Armengol no lo ha aclarado, pero según consta en el sumario, unas días después de la firma de la adjudicación, Soluciones de Gestión, hizo una transferencia de dinero a otra cuenta de su propiedad por importe de 2,2 millones de euros el 20 de mayo. Unas semanas después, el 30 de julio la firma trapasa 110.036 euros a Deluxe, una sociedad controlada por Víctor de Aldama, el presidente del Zamora CF.
Ese mismo día, Aldama hizo una transferencia por ese mismo importe a una cuenta en el Santander a nombre de una sociedad denominada Depósito Judicial de Murcia, adminitrada por Rogelio Pujalte y Dolares Mellado, también investigados. Según explica la UCO, una vez analizadas las cuentas tras la información remitida por distintas entidades financieras, "a juicio policial se puede concluir que Soluciones de Gestión (controlada por Cueto), a través de Deluxe Fortune (controlada por Aldama) hicieron llegar a una persona vinculada a Koldo, la cantidad de 100.000 euros directamente vinculados con los hechos investigados". Es decir, que el asesor de Ábalos cobró 100.000 euros del dinero público de Baleares. Armengol se ha negado a responder quién se puso en contacto con ella para propornerle la contratación de Soluciones, pero, en el sumario la Guardia Civil deja claro que el que cobró por la intermediación fue Koldo García, el asesor de Ábalos.Posteriormente a estos hechos, el Gobierno de Baleares emitió un certificado presentado ante el Instituto Nacional de Gestión Sanitaria (Ingesa) el 12 de agosto de 2020 en el que aseguraba que Soluciones de Gestión le había suministrado de "manera satisfactoria" las mascarillas. Era falso porque previamente el Centro Nacional De Medios De Protección (CNMP) había advertido al Ejecutivo de Armengol de que esas mascarillas no cumplían "con los requisitos de una mascarilla tipo FFP2", por lo que las autoridades sanitarias de las islas se vieron obligadas a comunicarlo a los centros dependientes y solicitar su retirada y "almacenamiento hasta que se tomen las medias oportunas".

Además, ayer, la presidenta del Congreso explicó que "compramos mascarillas que se nos vendieron como FFP2. Las mandamos a analizar al Instituto Nacional de Higiene y Salud en el Trabajo, nada que ver con el Gobierno Balear. El análisis refleja no filtran como FFP2, pero que funcionan como quirúrgicas, entonces decidimos almacenarlas". Y ha agregado que "miramos los precios y guardamos las mascarillas para poder reclamar la diferencia de precios a quienes nos las vendieron. Para que nos devolvieran todo el dinero tenía que estar todo el producto". Y pasó la patata caliente al Partido Popular. "Cuando ganan los populares en Baleares, se les explica el expediente. Son ellos quienes tienen la responsabilidad de explicar qué hicieron con ese expedientes que nosotros dejamos tramitados",
A partir de ahí se abre el segundo interrogante. ¿Por qué Armengol tardó tres años en reclamar el importe del contrato teniendo en cuenta que sabía que las mascarillas eran defectuosas? Es algo que tampoco ha explicado, limitándose a decir que trasladó el expediente al PP. En una conversación años después con el subteniente de la Guardia Civil Luis Rodríguez García, implicado en la trama, Cueto le cuenta que tenemos "un problemón de la hostia" en referencia a Baleares y que se lo contaría a Koldo. Esa es la razón por la que el asesor de Ábalos se citó en enero con el exminitro de Tranportes en el restaurante La Chalana para pedirle su intermediación. Armengol no lo explica pero la Guardia Civil va desenredando así la madeja.