El teletrabajo ha cambiado la forma en la que entendemos la necesidad de una oficina física, la flexibilidad laboral, y los entornos de trabajo a los largo del últimos año y medio. También, según revelan varias encuestas, las preferencias a la hora de elegir un puesto de trabajo o otro.
Todo ello, obviamente, teniendo en cuenta solo a las personas que se han adaptado bien a trabajar desde sus casas, algo que ni de lejos incluye a todos los empleados. Es más, la opción favorita sigue siendo el modelo híbrido.
Sin embargo, para los que sí que han abrazado el teletrabajo, parece claro que cambiar de casa y de lugar de residencia a otro que se amolde más a esta nueva situación es una de sus preferencias.
Un 25% de los teletrabajadores planea mudarse
Así lo deja claro un nuevo informe de Infojobs que recoge que 1 de cada 4 teletrabajadores dejará su lugar de residencia actual a lo largo del próximo año para vivir principalmente en el campo.
Esto plantea un fenómeno que hasta antes de la pandemia era imposible de imaginar: la denominada deslocalización laboral.
Concretamente, un 17% de estos profesionales en España indica que cambiará de lugar de residencia de forma puntual; mientras que un 7% señala que lo hará de manera permanente. Respecto al destino que estos escogerán para teletrabajar, el estudio se apoya en los datos de Fotocasa, que destaca como principales destinos las zonas rurales (46%), seguidas de las localizaciones cercanas a la costa (33%), el extrarradio de las grandes ciudades (22%) y las capitales de provincia (21%).
No es de extrañar que hayamos visto en estos meses varios pueblos ofreciendo ventajas a los teletrabajadores con el fin de recuperar población.
"Estos datos dejan entrever, por tanto, que el teletrabajo puede convertirse a largo plazo (actualmente los datos del INE no detectan cambios significativos en la movilidad) en una solución al éxodo rural, al mismo tiempo que revitalizar la compra y alquiler de viviendas en determinadas zonas del país", explican desde Infojobs.
En palabras de Mónica Pérez, directora de Comunicación y Estudios de InfoJobs. "La irrupción del teletrabajo y la aceleración del mundo digital han aportado una flexibilidad y cambio de mentalidad que, además de exigir modificaciones en la estructura de las organizaciones o la capacitación del personal, están provocando un cambio de la cultura del trabajo".
De Nómadas Digitales a empresas que quieren modular el salario según donde vivan sus empleados
Los resultados extraídos también confirman la existencia de un nicho de nómadas digitales. Y es que el 65% de los trabajadores que vivieron en otros lugares el pasado año tiene previsto volver hacerlo de nuevo este curso.
Una de las principales conclusiones del estudio es que el fenómeno de la deslocalización está especialmente vinculado a los trabajadores más jóvenes, aquellos entre 16 y 34 años. Así, el 17% de la cohorte de los millennials (siete puntos porcentuales más que la media nacional) afirma haber cambiado de lugar de residencia en el último año, frente a un 31% que dice que, a pesar de que sí teletrabajó, decidió no cambiar de residencia.
En el caso de la generación Z, el porcentaje profesionales que trabajó en una segunda vivienda es del 14%, mientras que un 23% de los que teletrabajaron afirma que no modificó su lugar de residencia. En esta franja edad cabe destacar que hasta un 64% (nueve puntos porcentuales más que la media nacional) señala que no tuvo la posibilidad de teletrabajar.
Frente a esto, está la postura que varias grandes tecnológicas han empezado a plantear ya, como la posibilidad de que los trabajadores vean recortados o aumentados sus sueldo si teletrabajan en función del lugar donde residan.