
La banca y los fondos lograron en 2023 limpiar sus balances de préstamos fallidos (NPL) en 16.000 millones de euros, según las estimaciones que maneja PrimeYield. Esta cifra supone un crecimiento en el volumen de NPL desinvertidos del 45,4% respecto a las cifras del cierre de 2022, cuando se transaccionaron carteras por 11.000 millones de euros.
Con estos datos, en España han conseguido ir contracorriente respecto a la tendencia europea en el mercado de venta de carteras morosas, ya que se "ha manifestado un dinamismo creciente a lo largo del año, tanto en número de procesos de venta (activos y en curso) como en el valor nominal agregado transaccionado", apuntan desde la compañía.
Desde Prime Yield apuntan que se podrían incluso superar los 16.000 millones de euros si finalmente se cierra la venta de "una cartera de morosos de Axactor por valor de 6.000 millones de euros, que, de completarse, dará un fuerte impulso a los resultados anuales del mercado de morosos en España".
Pese a estas cifras tan positivas, la firma especializada en la valoración de activos y préstamos inmobiliarios para fondos de inversión y entidades bancarias integrada en Gloval, destaca que "el mercado español seguirá cotizando por debajo de su dinámica prepandémica".
"Cabe destacar que 2023 ha sido un año a dos velocidades distintas en cuanto a ventas de morosos en España. La primera mitad del año se caracterizó por una actividad más moderada, acelerándose significativamente la entrada de carteras, especialmente las de mayor tamaño, a partir de mediados de año", puntualizan desde Prime Yield.
Operaciones potenciales
A partir del pasado verano se han puesto en marcha varios procesos de venta de carteras con un valor nominal muy elevado, entre los que destacan carteras como los proyectos Victoria (3.000 millones de euros, vendido por Sareb a Axactor) y Nebula (2.000 millones de euros, vendido por Blackstone a GCBE, empresa propiedad de Cerberus), que por sí solos tienen un valor de 5.000 millones de euros.
Sin embargo, subrayan que "la mayoría de las operaciones en curso se refieren esencialmente a activos no garantizados, lo que significa que el valor final de venta será relativamente bajo".
El informe de la firma explica por otro lado que "la creencia de que los préstamos dudosos aumentarán debido al crecimiento de los tipos de interés y la inflación favorece nuevas ventas no sólo en el mercado secundario, sino también entre los bancos, aunque estos últimos son más selectivos y más pequeños que en el pasado. Santander, CaixaBank, BBVA y Unicaja son algunos de los bancos que lideran este movimiento".
Según Francisco Virgolino, Managing Director de Prime Yield, "el mercado español se caracteriza por el retorno de las grandes carteras al flujo de operaciones, con una fuerte actividad del mercado secundario en esta fase".
"En cuanto a las perspectivas, nuestro país sigue la tendencia europea, donde el deterioro de las condiciones macroeconómicas en los últimos años probablemente tendrá un impacto en el aumento de los impagos a medio plazo, lo que debería conducir a un aumento de los préstamos morosos y, por tanto, a un refuerzo de las carteras de créditos impagados a la venta en el mercado", concreta.
España, el segundo país con más préstamos morosos
El informe de Prime Yield habla también del stock total de préstamos dudosos en España al cierre del primer semestre de 2023, que cifra en 76.700 millones de euros. Esta cifra supone que nuestro país acapara un 21% del total del mercado NPL europeo. Se trata de "una cifra que ha evolucionado de forma desigual desde principios de 2020, con anulaciones y anticipos trimestrales sucesivos", apuntan.
Sin embargo, ahora se encuentra en un nivel más alto del que cerró el año 2022 con 69.700 millones.
Si se comparan las cifras interanuales, es decir, con el cierre del primer semestre de 2022, los NPL en España han evolucionado positivamente, disminuyendo un 3% desde los 78.900 millones de euros registrados en junio de 2022.
En cualquier caso, España se coloca en términos de stock de créditos morosos en el segundo puesto europeo, solo por detrás de Francia que cuenta con un stock de NPL por valor de 115.500 millones de euros, según datos de la Autoridad Bancaria Europea (EBA). El pódium lo completa Italia con un stock de 43.400 millones.
En total, el sector bancario europeo cuenta con 361.000 millones de euros, un stock que ha registrado una caída interanual del 3%. "Sin embargo, los datos recientes también muestran cierto deterioro de la calidad de los activos en términos trimestrales, ya que el stock de morosidad ha aumentado un 1% desde finales de marzo de 2023, lo que equivale a 3.900 millones de euros", explica Prime Yield.
Reparto de los impagos
Según el informe, la morosidad de los hogares representa la mayor parte de la cartera de NPL del país, ascendiendo a 45.000 millones de euros en el segundo trimestre de 2023, el equivalente al 59% de la morosidad agregada, y de los cuales 21.700 millones de euros proceden de las hipotecas. El stock de morosidad de los hogares ha crecido en los últimos 12 meses un 3% en comparación con a los 43.700 millones de euros registrados a finales del segundo trimestre de 2022. Y un 5% frente a los 43.000 millones de euros del trimestre anterior.
Respecto a la morosidad debida a las hipotecas, esta ha disminuido un 5% interanual, de los 22.900 millones registrados en el segundo trimestre de 2022, aunque un crecido un 3% frente a los 21.100 millones del primer trimestre de 2023.
En cuanto a las empresas no financieras (NFC) el stock de créditos dudosos representa el 40% de la morosidad agregada, sumando un stock de morosidad de 30.900 millones de euros en el segundo trimestre de 2023.
La tendencia a la baja fue más marcada, ya que este componente cayó un 11% anual, desde los 34.600 millones de euros del segundo trimestre de 2022, y un 3% trimestral, desde los 31.800 millones de euros del primer trimestre.