
Uber vuelve a Barcelona más de tres años después de abandonar la ciudad por el conflicto abierto contra UberPop, que permitía poner en contacto a conductores privados con usuarios para compartir coche y que acabó en el Tribunal de Justicia de la UE. El servicio en la Ciudad Condal comienza este martes a las 8 de la mañana, y lo hace gracias al aumento de licencias VTC que se ha registrado en Barcelona en el último año vía sentencia judicial. Élite Taxi: "Uber trae miseria y precariedad laboral" | Madrid tendrá taxis compartidos para competir contra Uber y Cabify
"Llevamos más de un año trabajando para volver a la ciudad y no hemos lanzado hasta que no hemos sido capaces de garantizar un buen servicio. La llegada de nuevas licencias a Cataluña lo ha hecho posible. Durante los últimos dos años hemos visto niveles altísimos de demanda en Barcelona, como por ejemplo el medio millón de personas que abrieron la aplicación desde Barcelona el verano pasado", explican fuentes de la plataforma a este diario.
No en vano, en ocho meses los vehículos operativos con este tipo de licencias han crecido un 20% hasta las 920 coches sólo en Barcelona, según los datos publicado por el Ministerio de Fomento, mientras que en Cataluña ya rondan las 1.000 licencias activas a marzo de 2018.
Uber ha explicado que ya cuenta con 120 VTC registradas en su plataforma y que en las próximas semanas se irán incorporando nuevos vehículos en línea con el crecimiento de la flota de VTC en Barcelona, que todavía está muy lejos de las 2.933 que tiene Madrid actualmente, un 26% más que hace nueve meses.
Uber lanzó su servicio en la capital de España en 2016, debido a la alta disponibilidad de licencias VTC, que es un elemento clave para garantizar la calidad del servicio y los tiempos de recogida.
El director de Uber en España, Juan Galiardo, ha explicado que "Barcelona es una ciudad muy especial y esta vez queremos hacer las cosas bien". En este sentido, el directivo cree que "Uber puede formar parte de la solución al gran reto de movilidad de la ciudad y esperamos trabajar de la mano del Ayuntamiento, de la Generalitat y del sector del taxi para, entre todos, conseguir que cada día más barceloneses dejen su coche en casa".
En pleno conflicto con el taxi
La llegada de Uber a Barcelona se produce en pleno conflicto entre las plataformas de transporte y taxistas que tiene en el Real Decreto 1076/2017 en el centro de ambas partes. Las nuevas medidas, que ya han sido recurridas por Uber ante el Supremo, impedirán a los titulares de licencias VTC venderlas en los dos años siguientes a su consecución para evitar que se especule y se generen 'burbujas' con estos títulos.
Asimismo Uber o Cabify deberán inscribir todos los servicios que realicen en un registro público para garantizar que se efectúan conforme a la ley. Unas medidas criticadas por Competencia que las ha tildado de "desproporcionadas", "injustificadas" y "anticompetitivas" y por la propia plataforma norteamericana, que considera que "terminarán repercutiendo negativamente sobre los pasajeros, usuarios de los servicios VTC". La CNMC también está preparando un recurso contra el decreto que frena a las licencias VTC en favor del taxi.
Por su parte, la asociación de taxistas Fedetaxi considera que las medidas "contribuirán a evitar el desmantelamiento del sector que suponen los privilegios que se están atribuyendo empresas como Uber y Cabify". Asimismo, la asociación se está reuniendo con las distintas Comunidades Autónomas para aumentar las regulaciones a las VTC y lograr una mayor serie de requisitos para poder competir, y que beneficiarán al taxi con respecto a su competencia.