Apple ha renovado sus AirPods. Lanzados en 2016 se han convertido en los auriculares que han marcado el camino de la industria y no son pocas las compañías tecnológicas que han lanzado sus alternativas. Sin embargo, ninguna opción es tan redonda como la de Apple, que ahora es todavía mejor.
Los AirPods originales basaban su fortaleza en la conexión sencilla entre los dispositivos de la marca, la ergonomía en la oreja que permiten que no se caigan y duren horas puestos cómodamente así como la calidad de sonido. Ahora, con la versión de 2019, Apple construye sobre ellas para mejorar la autonomía, la relación con Siri e incorpora la posibilidad de tener una de las características más añoradas: la carga inalámbrica.
La segunda generación de los AirPods mantiene el precio con respecto a los originales, 179 euros. Eso sí, si se desea contar con carga inalámbrica habrá que comprar la versión que trae el estuche que permite este tipo de recarga (229 euros) o bien comprar posteriormente el estuche de forma individual (89 euros). La posibilidad de comprar el envase únicamente permite que los dueños de la primera generación de los auriculares actualicen con esta características sus AirPods.
Tanto el estuche como los propios auriculares son iguales exteriormente y sólo podremos diferenciarlos a simple vista porque la nueva generación incorpora un pequeño led frontal en la parte exterior. Así indicará cuándo ha comenzado a cargar -y cuando ha acabado- en el momento en el que se coloque sobre una base de recarga inalámbrica. Eso sí, el nuevo estuche sigue manteniendo el puerto lightning, con lo que se podrá seguir usando el cable como hasta ahora.
Chip H1: eficiencia y potencia para invocar a Siri
Aunque exteriormente la nueva generación de AirPods parezcan iguales a los lanzados hace tres años, su verdadera renovación se encuentra en el interior. Los nuevos dispositivos montan el H1, un potente chip propio desarrollado por la compañía que permite mejorar la autonomía, la conexión con los dispositivos e invocar al asistente con sólo decir "Oye Siri".
La posibilidad de llamar a Siri a través de un comando de voz da una libertad adicional al usuario cuando está usando los nuevos cascos. Hasta ahora, podía hacerse tocando dos veces sobre los auriculares, con lo que gracias a esto el usuario gana en autonomía para pedir canciones, sincronizar la agenda o realizar llamadas de teléfono.
Los dueños de los AirPods podrán seguir controlando la reproducción de música o gestión de las llamadas tocando la parte exterior de los auriculares, sin embargo, se sigue echando de menos no poder subir o bajar volumen con la mano. Si deseamos hacerlo sin tocar el móvil habrá que solicitarlo a Siri del mismo modo que se puede hacer con el HomePod.
Más allá de poder relacionarnos mejor con Siri el nuevo chip permite tener una conexión inalámbrica más estable y rápida, reseñable a la hora de hablar o jugar a videojuegos.
El proceso de sincronización entre dispositivos sigue siendo casi mágico -basta abrir la caja y los auriculares detectan el iPhone, Mac, Watch o iPad-, sin embargo ahora es más rápido y permite saltar entre ellos con mejor fricción.
Con respecto a la calidad de sonido, la nueva generación sigue conservando al menos el rendimiento de la generación anterior. Da la sensación de que se escuchan mejor que los lanzados hace tres años, pero Apple no da datos al respecto y no sé hasta qué punto se trata de una mejora del H1 o de una degradación de mis antiguos y muy usados AirPods 1.
Eso sí, la mejora de rendimiento del chippermite tener una autonomía de mayor duración. Los nuevos AirPods ofrecen hasta 5 horas de música y hasta 3 horas de conversación con una carga. Como sucedía en el modelo anterior, basta con colocarlos unos minutos en el estuche para volver a tener horas de autonomía. En este caso bastará con 15 minutos para disponer de 3 horas de música aunque en total se podrá tener 24 horas de uso con el estuche cargado por completo.
En suma, Apple ha conseguido hacer los cambios justos en uno de sus productos más redondos para añadirle nuevas funciones que mejoran la experiencia de usuario. El salto no es abismal entre ambos modelos, pero es un considerable paso hacia adelante hacia la búsqueda de tener los auriculares más completos posibles.