Las vacunas funcionan y los países ricos tienen el dinero suficiente para comprarlas y recibirlas a tiempo. Sin embargo, alcanzar el objetivo de la inmunidad de grupo parece imposible en la medida que van apareciendo nuevas variantes, se pone en duda la eficacia en el tiempo de las vacunas y crece el rechazo de las mismas entre la población joven y sana.
Un buen ejemplo de la complejidad que supone alcanzar la inmunidad de grupo es EEUU. El país norteamericano ha comprado las vacunas suficientes para inmunizar a toda su población y, seguramente, sea el primer país en autorizar el medicamento de Pfizer para los adolescentes entre 12 y 15 años. Sin embargo, parece que el presidente Joe Biden se está quedando sin estadounidenses dispuestos a recibir inyecciones de Covid-19, explica Bloomberg.
El equipo del presidente de los EEUU ha restado importancia a la lentitud que ha registrado el ritmo de vacunación en los último días. Es más, ya tenían contemplado el descenso del interés en vacunarse a medida que aumenta la cantidad de personas vacunadas. Así, la administración Biden ya ha dejado de predecir el umbral de la llamada inmunidad de grupo. Los asesores médicos del presidente han dicho que "es probablemente una frase que realmente no se aplica aquí a este virus en particular en esta circunstancia", dijo a CNN el jefe de gabinete de la Casa Blanca, Ron Klain, esta semana.
Lo importante es vacunar a las personas más vulnerables
Por su parte, Amesh Adalja, investigador principal del Johns Hopkins Center for Health Security, ha explicado a Bloomberg que algún nivel de declive en la aceptación de la vacuna era inevitable. "Sabíamos que, cuando ingresáramos a la población general, habría menos motivación para la vacunación y chocaríamos contra una pared, pero todavía estamos viendo los beneficios de la vacuna", dijo. Sin embargo, pone de relieve que el objetivo de las vacunas era reducir las hospitalizaciones y muertes por Covid-19, y la alta aceptación de las mismas entre las personas más vulnerables ya ha comenzado a hacer eso, dijo.
Así es el plan de Joe Biden para vacunar a la mayor población posible
Este creciente desinterés por recibir vacunas entre la población más joven y que menos riesgo tiene de morir o sufrir una hospitalización ha llevado al presidente de EEUU a trazar una nueva estrategia de vacunación basada en tres pilares.
1. Hacer que las vacunas sean más fáciles de encontrar: el gobierno ha creado una herramienta de mensajes de texto y sitios web para encontrar citas, y ha ordenado a las farmacias que dispongan de más espacios sin cita previa. La administración también comenzará a enviar más vacunas a clínicas de salud rurales y centros móviles, en parte para enfocarse en aproximadamente el 10% de los estadounidenses que viven a más de 8 kilómetros de un sitio de vacunación.
2. Convencer de la efectividad de la vacuna: el equipo de Biden está tratando de persuadir a los estadounidenses reticentes para que se vacunen, instándolos a hablar con sus médicos, farmacéuticos, líderes religiosos o vecinos vacunados. "Incluso si su probabilidad de enfermarse gravemente es baja, ¿por qué correr el riesgo cuando tiene una forma segura, gratuita y conveniente de prevenirlo?", dijo Biden recientemente.
2. La vacunación de adolescentes: EEUU próximamente autorizará la vacuna de Pfizer para niños de 12 a 15 años, lo que podría abrir la elegibilidad a millones que no pueden recibir una vacuna ahora. Además, el presidente presionará para que la mayor cantidad posible de adolescentes reciban su primera vacuna en julio, para asegurarse de que estén completamente vacunados a tiempo para la escuela en el otoño.
Relacionados
- Los creadores de Pfizer dicen cuándo será el fin la pandemia en todo el mundo (incluida India)
- La inmunidad de grupo, más cerca: los vacunados con Pfizer no transmitirían la enfermedad
- La Calculadora de Vacunación predice que la inmunidad de rebaño se logrará en febrero de 2022
- Seis motivos que harán imposible lograr la inmunidad de rebaño de covid-19 en el mundo