La Ejecutiva Nacional de Ciudadanos ha ordenado este miércoles a su secretario general, José Manuel Villegas, y al Comité Autonómico de Andalucía iniciar una negociación con el PP para que Juan Marín sea presidente de la Junta y garantizar un cambio "tranquilo, moderado" junto a otro partido constitucionalista. Por otro lado, la formación de Albert Rivera no ha querido aventurar si habrá pacto con Vox, pero sí ha considerado "irresponsable" dejar a la fuerza de Santiago Abascal fuera de cualquier escenario.
Este escenario se suma -y distancia- del planteado por Pablo Iglesias este mismo miércoles en el que abría la puerta a valorar un apoyo a Ciudadanos para gobernar en Andalucía con el visto bueno también del PSOE-A a cambio de frenar a Vox. Esta opción, sin embargo, no convence a la líder de Adelante Andalucía, que se ha cerrado a tal paso.
De la decisión de la reunión de Ciudadanos hoy ha dado cuenta en rueda de prensa el propio Rivera, que no ha descartado que los dos partidos compartan el Gobierno ni que Cs lo ocupe en solitario, ha recalcado que lo importante es dialogar "con aquellos que defienden los valores constitucionales y que quieren un cambio en Andalucía" para formar un Ejecutivo "estable, serio y moderado, sin sectarismos ni políticas excluyentes".
A la pregunta de si descarta un acuerdo con Vox, ha respondido que la "prioridad absoluta" de su partido es que el presidente de la Junta sea Marín y que haya "un Gobierno de cambio" basado en un pacto entre PP y Ciudadanos. Contestando también al ex primer ministro francés Manuel Valls, que aspira a la Alcaldía de Barcelona con el respaldo de Cs y espera que la formación naranja no pacte con Vox en Andalucía, ha añadido: "Con cinco partidos en el arco parlamentario y un cambio a ejecutar, sería una irresponsabilidad ponernos a descartar todos los escenarios que hay encima de la mesa", recoge Europa Press.
Rivera no ha descartado que la dinámica institucional y parlamentaria derive en pactos puntuales con otras formaciones políticas, por supuesto el PSOE pero también Vox. En todo caso, una clave de ese día a día la tendrá el PSOE, ha alertado, si demuestra que tiene o no "sentido de Estado" para permitir ese cambio aunque no lo aplauda.
Los tres ejes de la negociación
Sobre el papel, la dirección nacional ha aprobado un mandato a Villegas y a la dirección regional para negociar la formación de un nuevo gobierno en Andalucía con tres condiciones. La primera, "que haya cambio" después de 37 años de gobiernos socialistas, para lo cual es requisito imprescindible que el PSOE asuma "la derrota" y que pase a la oposición, informa Servimedia.
La segunda es conseguir la Presidencia de la Junta para Juan Marín, al entender que ese cambio tiene que estar liderado por alguien "limpio, sin casos de corrupción", a diferencia tanto del PSOE como del PP, que ha demostrado su capacidad de dialogar con unos y con otros, y que además es el único que ha crecido respecto de los anteriores comicios.
La tercera premisa es la apertura inmediata de esa negociación, que será "prioritaria" con el PP porque ambos, ha destacado Rivera, suman prácticamente lo mismo que sumaban en la anterior legislatura con el PSOE y puede ser una mayoría estable.
Rivera ha dejado claro que la Presidencia para Marín es prioridad absoluta en esa negociación, porque encarna el cambio mejor que el PP y porque será un presidente que no tendrá que estar pendiente de los tribunales y está "blindado" de ese tipo de interferencias.
El PP no ve"sensato" que Ciudadanos lidere el cambio y amenaza con la repetición electoral
El propio Juanma Moreno ha manifestado que "no ve sensato" que Ciudadanos quiera liderar el cambio en Andalucía cuando ha tenido cinco escaños menos que los 'populares' en las elecciones del pasado domingo. Así lo ha indicado durante su intervención en la junta directiva del PP de Málaga, donde también ha reclamado a Díaz que "tenga la dignidad suficiente para entender la nueva situación política en Andalucía".
Asmismo, la portavoz del PP en el Congreso de los Diputados, Dolors Montserrat, ha avisado a Ciudadanos de que provocará una repetición electoral en Andalucía si no apoya a Moreno para que sea presidente de la Junta. En declaraciones a los periodistas en la Cámara Baja, Montserrat ha lazando esta advertencia después de la comparecencia de Rivera.
"Quien está liderando el cambio en Andalucía es el PP, el más votado", ha defendido Montserrat, para acto seguido afear a la formación naranja que quiera ahora acudir a la investidura en Andalucía siendo tercera fuerza cuando logró el primer puesto en los comicios catalanes y ni lo intentó.
"A lo único que nos puede llevar si no se suma al cambio presidido por Juanma Moreno será a otras elecciones y los andaluces jamás lo perdonarán", ha sostenido, esgrimiendo que los ciudadanos han dicho en las urnas que quieren un cambio "y no un PSOE arrodillado con el independentismo".
Susana Díaz insta a Ciudadanos a aclarar si están dispuestos a apoyarse en Vox
A su vez, Díaz, ha pedido a Rivera que aclare si el "cambio" que quiere en el Gobierno andaluz lo va a hacer "de la mano de la extrema derecha" de Vox, al tiempo que ha recordado que un gobierno formado con los votos de PP-A y Ciudadanos "inevitablemente necesita" la participación de Vox. "Si el cambio es entregarse a un partido de extrema derecha, tendrá que reflexionar sobre eso", ha añadido.
En una entrevista en laSexta, Susana Díaz ha respondido así a Rivera, quien ha anunciado que dará prioridad a negociar un Gobierno de "cambio" en Andalucía con el PP, pero pidiendo la presidencia para Marín. Lo primero que tiene que saber Rivera, según ha contestado la socialista, es que el PSOE-A "ha ganado las elecciones", aunque no de la manera en la que les habría gustado.
En segundo lugar, ha pedido al líder de Ciudadanos que diga si "está dispuesto a que ese cambio se haga de la mano con la extrema derecha que hoy ha dicho que quiere cerrar Canal Sur, que quiere derogar la ley de igualdad y contra la violencia machista" y que considera que las mujeres maltratadas son "desaprensivas". "Si Rivera piensa apoyarse en un partido de extrema derecha es ese cambio, lo no comparto ni yo ni los socialistas andaluces", ha añadido.