El presidente de la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo, Manuel Marchena, ha señalado la "difícil situación" en la que se encontraría este órgano en el caso hipotético de tener que juzgar a otros encausados en la causa del procés independentista en Cataluña -aludiendo sin citar expresamente a los huidos como el expresident Carles Puigdemont- habida cuenta de que 13 de los 15 magistrados que la integran han tenido relación con este asunto en sus fases de instrucción o enjuiciamiento. En Directo | Reacciones a la sentencia del procés.
Ha sido durante su comparecencia ante la Comisión de Calificación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), al presentar el proyecto para renovar el cargo por otros cinco años (es el único candidato) cuando Marchena ha recordado que además de los siete magistrados que han integrado la Sala del procés hay que sumar al instructor, Pablo Llarena, a los tres magistrados de la sala de recursos durante la instrucción, otro magistrado que sustituyó a uno de ellos que se puso enfermo y la juez Carmen Lamela -instructora de la causa contra el mayor de los Mossos d'Esquadra Josep Lluis Trapero en la Audiencia Nacional-.
Marchena, que se plantea si anticipar un debate jurisprudencial sobre este asunto, ha señalado que aunque existe jurisprudencia del Tribunal Constitucional que avalaría que los mismos siete magistrados que vieron la causa contra los 12 líderes independentistas pudiera enjuiciar a los huidos, la circunstancia en sí misma situaría a la Sala de lo Penal del Supremo en una "situación difícil".
"En otro tipo de juicio quizá esto pueda resolverse, pero habrá que estudiarlo al tratarse en este caso de magistrados que han valorado a 500 testigos, 12 acusados, metros cúbicos de papel y que podría tener que volver a enjuiciar hechos similares con distintos protagonistas, ello nos sitúa en una situación difícil", ha indicado.
Sin abundar más en este asunto, Marchena, en su primera aparición pública tras publicarse la sentencia -de la que ha lamentado las manifestaciones- ha asegurado que aún desconoce si la solución en caso de detención y enjuiciamiento de Puigdemont -sobre el que hay una nueva euroorden de detención- podría pasar por sustituciones o se abriría a otro modelo.
Magistrados de lo Militar
Ante la posibilidad de que se optara por las sustituciones, los magistrados de la Sala de lo Militar del Tribunal Supremo no estarían excluidos del turno de sustitución. Según fuentes del alto tribunal recogidas por Europa Press, la posibilidad de que se opte finalmente por dejar entrar a magistrados de otras Salas no es en modo alguno descartable.
Los magistrados de lo Militar tienen competencia en asuntos penales en dicho ámbito, por lo que su entrada en una sala de sustitución no podría ser cuestionada en este aspecto. De optarse finalmente por estos magistrados deberían ser previsiblemente elegidos entre los ocho de procedencia judicial.
La solución, siempre en el caso de que Puigdemont sea detenido y entregado a España, podría pasar por un acuerdo de la Sala de Gobierno del Tribunal Supremo que deje prestablecida la sustitución entre Salas, un mecanismo que jamás se ha aplicado en el alto tribunal con anterioridad.